Al menos 20 personas murieron y otras 50 resultaron heridas este jueves por la mañana en atentados en dos mercados de la provincia de Bagdad, lo que eleva a 27 el balance provisional de muertos en Irak.

Trece personas murieron por la explosión de cuatro bombas en un mercado de Sabaa al Bur, una ciudad chiita al norte de la capital, y otras siete perdieron la vida en un mercado sunita de Bagdad, informaron fuentes médicas y de seguridad.

Por otro lado, un grupo de hombres mató a cinco miembros de una familia tras entrar en su casa de una aldea cercana a Mahmudiya, al sur de la capital.

Un policía también murió asesinado en Mosul (norte) y un empleado de televisión corrió la misma suerte en Baquba, al nordeste de la capital.

Casi 700 personas han muerto en Irak desde el comienzo de septiembre en actos violentos y más de 4.500 en lo que va de año, según un balance de la AFP basado en fuentes de seguridad y médicas.

A finales de agosto, la misión de la ONU en Irak reportaba la cifra de 5.000 civiles muertos y 12.000 heridos en lo que va del año en el país, lo que confirma unos índices de violencia similares a los de hace cinco años.

Expertos y diplomáticos han pedido al gobierno iraquí, controlado por los chiitas, que acepte aplicar reformas para amainar la ira de los sunitas, que acusan a Bagdad de acaparar todos los poderes y de efectuar detenciones arbitrarias.