Un atentado contra la infraestructura petrolera y un ataque contra una patrulla militar que dejó cuatro muertos y cuatro heridos fueron atribuidos por las autoridades a las Farc.
El Ejército Nacional informó que entre la tarde y la noche del martes ocurrieron dos ataques con explosivos a la estructura del oleoducto Caño Limón-Coveñas, el segundo más importante del país, con unos 780 kilómetros de extensión.
"Las Farc, haciendo uso indiscriminado de artefactos explosivos improvisados", dijo el Ejército en un comunicado, agregando que los irregulares “interrumpieron el normal flujo del crudo” en el sector comprendido entre los kilómetros 419 y 359 del oleoducto.
Esos hechos ocurrieron en zonas rurales de Norte de Santander, causando "grandes daños a la población civil", pues se produjo un "derrame de crudo sobre uno de los principales afluentes hídricos" de la región, explicó el Ejército.
Al cierre de esta edición, las autoridades no habían determinado la cantidad de petróleo derramada, pero aseguraron que tropas militares están desplegadas en la zona para "permitir el acceso al personal que realizará la reparación de los tramos afectados".
Por otro lado, en Cartagena del Chairá, Caquetá, fallecieron cuatro militares y cuatro más resultaron heridos "tras la activación de un área preparada con explosivos, instalados por terroristas del Frente 63 del Bloque Sur de las Farc", dijo el Ejército en otro comunicado.
Estas acciones armadas en distintas zonas del país ocurren en medio de la arremetida de la guerrilla de las Farc tras la suspensión del cese el fuego unilateral que mantenían desde diciembre. El violento accionar guerrillero ya deja 10 fallecidos -nueve de ellos uniformados-, además de afectaciones ambientales y a poblaciones enteras, con ataques a infraestructuras energéticas y civiles.
Colombia es el cuarto productor petrolero de América Latina, después de Venezuela, México y Brasil, y produce alrededor de un millón de barriles de crudo diarios./AFP