El juez 43 penal municipal de Bogotá, con función de control de garantías, cobijó con medida de aseguramiento consistente en detención domiciliaria al fiscal 3° seccional del municipio de Funza (Cundinamarca), Miguel Orlando Peña Pirazán, quien aceptó el delito de concusión.

En su decisión, el juez consideró que el funcionario es padre cabeza de familia, no tiene antecedentes penales y cuenta con arraigo, por lo que se le concedió esta medida de aseguramiento, que cumplirá en su casa en Mosquera (Cundinamarca). Peña Pirazán debe velar por la salud de su hijo, menor de edad.

Gracias a la investigación adelantada por el CTI de  Cundinamarca,  el fiscal tercero seccional habría exigido dinero a una persona a la cual su despacho le adelantaba una investigación  relacionada con la venta de un terreno.
De acuerdo con la denuncia presentada, Peña Pirazán comunicó a la víctima que estaba involucrada en la comisión de un delito, por lo que debía valorar cual era el precio de la libertad, de tal manera que  debía ofrecer una cantidad adecuada, que resultó ser de diez millones de pesos.