Alepo enterró este martes a 31 personas, 14 de ellas niños, muertos cuando un misil tierra-tierra alcanzó un barrio de esta ciudad del norte de Siria, en un día en que dos obuses cayeron cerca de un palacio presidencial en Damasco, por primera vez en los casi dos años de conflicto.
Al mismo tiempo, dos aviones de Rusia cargados con decenas de toneladas de ayuda humanitaria llegaron al aeropuerto de Lataquia (noroeste) y uno de ellos evacuó a un centenar de rusos que deseaban abandonar el país ante el aumento de los combates entre rebeldes y soldados regulares.
Principal aliado del régimen de Bashar al Asad, Rusia anunció que el 25 de febrero recibirá al ministro de Relaciones Exteriores sirio, Walid Mualem, y a principios de marzo al líder de la oposición, Ahmed Moaz al Jatib, para intentar mediar en esta guerra que, según la ONU, ya dejó unos 70.000 muertos.
En Alepo, al menos 31 personas, entre ellas 14 niños y cinco mujeres, murieron y otras decenas resultaron heridas por la caída de un misil tierra-tierra sobre el barrio popular de Rabal Adro, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSUDO).
"Al parecer fue un misil tierra-tierra debido a la extensión de los destrozos y porque no hubo más que un tiro, sin que los habitantes informaran de vuelos de la aviación", precisó esta organización que obtiene la información de una red de activistas y médicos en el país.
"Es un barrio popular compuesto por viviendas de mala calidad. Un solo misil destrozó el sector", recalcó Abu Hicham, un militante de Alepo.
En Tal-Aran, en el sudeste de la provincia de Alepo, llegaron refuerzos militares, según el OSDH. Quieren "prevenir que los rebeldes tomen el aeropuerto internacional de Alepo", el segundo en importancia después del de Damasco, afirmó Rami Abdel Rahmane, director del OSDH.
Obuses en Damasco
Por primera vez después de que el 15 de marzo de 2011 estallara la revolución popular reprimida por el régimen que desencadenó el conflicto, dos obuses de mortero "fueron lanzados por terroristas hacia el recinto sur del palacio Techrine, provocando daños materiales", según la agencia oficial Sana.
Los obuses cayeron delante de dos hospitales, situados a varios cientos de metros del recinto del palacio, en el oeste de la capital.
El consejo militar del Ejército Sirio Libre (ESL), el principal actor de la rebelión, reivindicó en su página de Facebook el disparo contra el palacio.
Este martes, la violencia dejó en Siria 40 muertos, según un balance provisional del OSDH.
En el oeste del país, uno de los aviones rusos aterrizados en Lataquia evacuó a un centenar de rusos, principalmente mujeres y niños de distintas partes de Siria, según responsables citados por los medios rusos.
Debido a la guerra, más de cuatro millones de personas necesitan ayuda en Siria, indicó la ONU, que evocó las dificultades en la distribución de la ayuda humanitaria debido principalmente a la negativa del régimen a su entrega a través de la frontera con Turquía, país que apoya a los rebeldes.
AFP.