Un proyecto de reformas al Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) fue presentado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que las trasladará a la asamblea continental del 22 de marzo.

El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, manifestó su optimismo respecto a que el debate sobre el fortalecimiento del SIDH concluirá con éxito a fines del próximo mes.

“Estoy convencido que podemos avanzar en las resoluciones para llegar a la Asamblea General Extraordinaria del 22 de marzo con éxito”, afirmó sobre la cita en la cual los cancilleres de la región pondrán punto final al proceso de fortalecimiento del SIDH.

El máximo representante de la OEA agradeció expresamente al presidente de la CIDH, José de Jesús Orozco, y al secretario ejecutivo de la Comisión, Emilio Álvarez, por sus contribuciones al diálogo.

El Secretario General destacó positivamente la propuesta de la Comisión, que ahora será examinada por los Estados Miembros, indicando que “aplica en un 80 por ciento las resoluciones" del Grupo de Trabajo del Consejo Permanente que fueron aprobadas por la Asamblea General de la OEA de Cochabamba, en junio de 2012.

En la sesión extraordinaria del Consejo, Orozco presentó las propuestas de reformas al Reglamento, al Plan Estratégico y a las prácticas de la Comisión, que serán sometidas a consulta pública durante las próximas dos semanas. El comisionado mexicano explicó que la Comisión se basó en tres principios para redactar su documento: “integridad, objeto útil y transparencia”, es decir, que las propuestas tomen en consideración las 53 recomendaciones realizadas por los Estados Miembros a la Comisión; que beneficien la protección y la promoción de los derechos humanos; y que su contenido haya sido transmitido a todas las partes interesadas con la suficiente antelación para que pudieran expresar su opinión.

Proceso

La Asamblea General Extraordinaria del 22 de marzo pondrá fin a un proceso que se inició en la Asamblea General de El Salvador, en junio de 2011, con la creación del Grupo de Trabajo Especial del Consejo que presentó su informe de recomendaciones en enero de 2012. Posteriormente, la Asamblea General celebrada en Cochabamba, Bolivia, en junio de 2012, instruyó al Consejo Permanente a concluir sus trabajos en la materia antes de acabar el primer trimestre de 2013. Para cumplir con el objetivo marcado, el Consejo aprobó un Plan de Trabajo en septiembre de 2012, que se encuentra actualmente en su tercera fase titulada “Elaboración del informe de propuestas, así como sus implicaciones presupuestarias para consideración de la Asamblea General”.

Durante la sesión, participaron los representantes de Grenada, Ecuador, Costa Rica, Dominica, Estados Unidos, Canadá, Argentina, México, Colombia, Brasil, Guatemala, Venezuela, Perú, Nicaragua, Uruguay, Chile, Bolivia, El Salvador y Haití.

Consulta pública

Hasta el 1 de marzo la CIDH recibirá observaciones y comentarios sobre el programa integral de reforma que planea efectuar durante el primer semestre del año 2013.

Este programa de reforma se deriva de varias fuentes. La Comisión ha llegado a la convicción de que algunas de sus instituciones procesales requieren una revisión sustancial con el propósito de hacer honor a su desarrollo y a la consecución de su objeto útil. Esta convicción se ha alimentado en forma muy importante por las observaciones y recomendaciones que todos los actores del Sistema han presentado en el curso de los últimos 18 meses a través del proceso de fortalecimiento del Sistema Interamericano de protección de los derechos humanos.

En particular, el 29 de junio de 2011, el Consejo Permanente de la OEA creó un Grupo de Trabajo Especial de Reflexión sobre el Funcionamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para el Fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, cuyo informe fue adoptado el 25 de enero de 2012 por el Consejo Permanente de la Organización. Adicionalmente, un gran número de organizaciones de la sociedad civil ha manifestado su opinión sobre las recomendaciones formuladas. Así por ejemplo, el 27 de enero de 2012, tras la aprobación de las recomendaciones del Grupo de Trabajo por parte del Consejo Permanente, más de 90 organizaciones de derechos humanos suscribieron un comunicado expresando su opinión sobre las recomendaciones y la necesidad de abrir un espacio de diálogo para su discusión. El 28 de marzo de 2012, la Coalición Internacional de Organizaciones por los Derechos Humanos en las Américas, en representación de más de 700 organizaciones de la sociedad civil, también expresó su opinión sobre algunas de las recomendaciones aprobadas en una audiencia pública ante la CIDH.  Durante el último año, cientos de organizaciones han participado en audiencias y foros celebrados en más de una docena de países del continente.  La Comisión se ha mantenido en diálogo constante con el Consejo Permanente de la Organización y con sus Estados Miembros y Observadores.

Las presentes propuestas de reforma del Reglamento, las políticas y las prácticas de la Comisión son el resultado de una cuidadosa ponderación de todos los comentarios recibidos, así como de un cuidadoso análisis del funcionamiento de la Comisión y del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, realizado con base en tres principios fundamentales.

Principio de integralidad. El proceso de reforma ha incluido consideración sobre todas y cada una de las recomendaciones presentadas a la Comisión.

Principio de fortalecimiento del objeto útil de la Comisión. Todas las recomendaciones analizadas han sido escrutadas contra un parámetro único, a través del cual la Comisión ha ponderado, detallada y muy cuidadosamente, cuál es el resultado previsible de su implementación.  Cuando este ejercicio objetivo, técnico e independiente ha llevado a la Comisión a la conclusión de que la medida beneficiará la protección y la promoción de los derechos humanos, la Comisión la ha incluido en su programa de reforma y ha previsto su completa implementación; y

Principio de transparencia.  La Comisión ha hecho llegar a todas las partes toda la información pertinente en tiempo y forma, y mantiene su compromiso de continuar haciéndolo.

El programa de reforma se divide en tres instrumentos: un proyecto de reforma reglamentaria, un programa de posibles reformas al Plan Estratégico de la Comisión, y un programa de cambio de prácticas.  A través de éstos, la Comisión se propone dar implementación al programa de reforma  a través de las herramientas más propicias para asegurar su pleno impacto.

Esta consulta constituye un paso más en este proceso. Cuando concluya el plazo para observaciones la Comisión considerará y ponderará todas las observaciones recibidas, deliberará, adoptará el programa de reforma, y lo publicará, junto a la exposición de sus motivos.