Desempleo, inflación y pobreza: los cocos en 2022 | El Nuevo Siglo
El desempleo aún sigue por encima de niveles prepandemia y hay más de 9 millones de pobres en el país.
Lunes, 3 de Enero de 2022
Redacción Economía

El desempleo se ubicó en 10,8% en noviembre del 2021, mientras que los últimos datos de inflación en el año corrido alcanzaron 4,86 % y la anual llegó a 5,26 % en el penúltimo mes del año pasado. Entretanto, la pobreza multidimensional alcanzó una cifra alarmante: 9,04 millones de pobres en el país.

Precisamente estos tres temas son los que más revuelo causan en el panorama económico de la nación.

Cada uno tiene un análisis diferente, pero que se encadena en las perspectivas de este año y en las posibles soluciones que le podría dar el Gobierno.

Desempleo

El académico César Ferrari piensa que aún antes de la pandemia el empleo formal era una de las grandes deudas que se tenían en el país. “La tasa desempleo en Colombia está alrededor y por encima de dos dígitos. En épocas normales está alrededor de un solo dígito, pero cercano los dos dígitos. En una economía normal no es algo adecuado, una tasa normal de pleno empleo en un país desarrollado es del orden del 3% al 4% de la cantidad total de trabajadores”, explica.

Además, cree que para crecer no solo se debe combatir el desempleo o la desocupación, sino también el subempleo: “Estamos hablando de una tasa del 10% y si le sumas a eso los trabajadores subempleados que son entre 25% y 30%, tenemos casi al 40% la población trabajadora que no tiene ningún tipo de ingreso o tiene un ingreso precario, eso sin duda tiene que ver con que la economía formal no produce los suficientes puestos de trabajo para la totalidad de la población. Son unos pocos que se quedan desempleados y hablamos del 10% ¿Y el resto?" se pregunta Ferrari.

Sin duda el Ph.D. en economía considera que se debe cambiar la visión productiva del país, con ello se entraría a competir con economías más avanzadas, “el país tiene enormes ventajas comparativas en la agricultura y ciertamente en la transformación de la agricultura, que es un sector agropecuario. Me parece que ese sector tiene un gran potencial y, de hecho, hay enormes cantidades de tierra que están dedicadas a un uso poco productivo o simplemente están sin usarse, pero también habría que pensar en potenciar las manufacturas y el turismo, y tal vez la economía digital. La realidad es que esos sectores que además son intensivos en mano de obra podrían permitir solucionar el problema del desempleo que agobia a gran parte del país”, afirmó.

Por su parte, el sector financiero cree que a pesar de mejorar la cifra de empleo para los últimos meses de 2021, este año la situación no será igual. Santiago Espitia, especialista macroeconómico de Bancolombia lo ve así:

“La corrección de la desocupación sería menos pronunciada en 2022. Ello sería el resultado de la desaceleración de la economía y el entorno de incertidumbre, el cual condicionaría la contratación de mano de obra por parte del sector productivo. Asimismo, como resultado de la consolidación fiscal el sector público será un demandante de personal menos dinámico. Ahora bien, creemos que el sesgo hacia la informalidad en la recuperación de la ocupación podría reducirse, gracias al efecto de los programas públicos de apoyo al empleo de los grupos poblacionales más vulnerables”, explicó el analista.

Inflación

La crisis de los contenedores hizo que la inflación creciera no solo en Colombia, sino a nivel mundial. A pesar de ser un tema externo, el gobierno tendrá que revisar cómo mantiene este dato por debajo del rango meta del Banco de la República, que mantuvo en el 4,9% el pronóstico de inflación de Colombia para el final de 2021. Mientras que en 2022 el dato del costo de vida volvería a la meta del 3% del emisor.

Juan Manuel Pacheco Pérez, analista de mercados y banca central de Bancolombia exponía en un informe de la entidad, que la inflación entre 2021 y 2022 no sería muy diferente, “Prevemos que la inflación cerrará 2021 en 4,8%. Esta previsión contempla que los precios de los alimentos continuarán aumentando en los próximos meses, con lo que esta categoría presentaría una variación anual cercana al 13%. Tal comportamiento se compensaría parcialmente con el efecto a la baja promovido por las jornadas sin IVA. Ya la primera de estas fechas llevó a que en octubre la variación mensual del IPC fuese de apenas 0,01%, por efecto del retroceso en vestuario y comunicaciones”

Por su parte, incrementaron el pronóstico de 2022 a 4,3% para el promedio del año. En relación con el promedio de este año, esto implicaría un aumento cercano a 1 punto porcentual, ya que durante los primeros meses de 2022 la variación 12 meses del IPC superaría el 5%.

“Además de responder a la baja base de comparación, dicha aceleración estaría determinada por los menores excesos de capacidad productiva, ante la recuperación más acelerada de la actividad económica en meses recientes. Asimismo, hay que tener presente la operación de los mecanismos de indexación de precios, que no solo influirán en las revisiones salariales, sino que también repercutirán en renglones como los arriendos y la educación”, explicó Pacheco Pérez.



Los choques

Otro importante analista económico, Munir Jalil, director de investigaciones Económicas para la Región Andina en BTG Pactual, dice que continuará la persistencia inflacionaria, que se va a mantener durante el primer semestre de 2022 para luego, entrar a converger. Sin embargo, es importante resaltar que la inflación será mayor si los choques de oferta perduran más de lo esperado.

Asimismo, Jalil afirma que el próximo año tendrá un ambiente en donde hay liquidez, a un nivel más estable y un aumento en las tasas de interés, que, si bien preocupan, podrían controlarse siempre y cuando exista una dinámica de precios básicos.

Asimismo, una de las formas de controlar la inflación es la tasa de interés, que la junta del Banco de la República ha venido subiendo en sus últimas reuniones. Aunque esta medida puede frenar esa contingencia, también debilitaría el crecimiento económico.

Desde Bancolombia se estima que “los incrementos de 50 puntos básicos, se repetirá de nuevo en enero de 2022, y que posteriormente se regresará a ajustes de 25 puntos básicos. Esto se debe a que en el corto plazo la actividad seguirá exhibiendo un gran dinamismo. Asimismo, una actuación contundente de la autoridad monetaria en momentos en los que se definirá una parte sustancial de los ajustes de precios y salarios sería una señal valiosa para lograr que estos sean contenidos”.

Pobreza

Esos factores, el desempleo como la inflación, harían que más colombianos pudiesen entrar en la pobreza. Según cifras del DANE, la pobreza monetaria se situó en el 42,5%, con respecto a 2019, lo que significa que el número de pobres creció de 17,4 a 21 millones de personas, desde el inicio de la pandemia.

Para Maurico Perfetti, exdirector del DANE, este es el gran reto, tanto del gobierno saliente, como del entrante, según lo dijo en su columna del diario El Colombiano. “La pandemia también dejó una pobreza creciente, que lanzó a 3,5 millones de colombianos más a esa condición y a más de 2,7 millones a la pobreza extrema. Preocupante combinación un aumento en la pobreza con desempleo por encima de un dígito y mayor informalidad, en un contexto de inflación, déficit fiscal del 8m6% del PIB y deuda bruta de 66,8% del PIB. Esta combinación es uno de los retos grandes que deja el 2021 y que será definitivo en las próximas elecciones”, señalaba el economista antioqueño.

Soluciones encadenadas

César Ferrari explica que estos fenómenos van de la mano y que hay que saber cómo solucionarlos. Para él, la inflación que se deriva de la crisis de los contenedores no debe ser una preocupación latente del gobierno pues esta se solucionará, que por el contrario se debe enfocar en generar productividad en los sectores que más empleos puedan crear.

“No se puede arreglar el desempleo sin arreglar la estructura productiva del país. La inversión privada hay que canalizarla y generar empleos e incentivos que se vayan a los sectores más abundantes en manos de obra y resolver así el problema el empleo, y de esa manera se arregla de una vez el problema de la pobreza y de la inequidad. Entonces en ese escenario, preocuparse por la inflación del 5%, que es de inflación externa y de problemas de contenedores y del orden mundial, pues no tiene mucho sentido.