La Secretaría de Gobierno de Bogotá, en coordinación con las alcaldías locales y con el Instituto para la Economía Social, IPES, dieron inicio al plan de apoyo para la recuperación económica de los comerciantes con varias medidas que estos deberán cumplir para cuidar su salud y la de su clientes.
El anuncio lo hizo desde el 20 de julio en la localidad de San Cristóbal el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, quien refirió que por ejemplo esta es una de las zonas en las que los vendedores y comerciantes informales podrán trabajar. “No es un secreto para nadie que parte de los daños que ha ocasionado esta pandemia aparte de cobrarnos vidas y haber causado la enfermedad, es que muchas personas han perdido sus empleos”, aseguró.
Nuevas zonas peatonalizadas
Las zonas populares de Bogotá que se peatonalizarán para incentivar el trabajo del sector son las calles de San Victorino (calles 10 y 11, entre carreras 13 y 10); El Veinte de Julio (Calle 27 sur, entre carreras 8ª y 5ª y Carrera 6, entre calles 27 y 25 sur); Usaquén (Carrera 6A, entre calles 120 A y 116); Fontibón (Calle 17A, entre las carreras 99 y 100), y por último el Parque Nacional a lo largo de la Calle 36, desde la Carrera Quinta y la Carrera Séptima.
El secretario también señaló que se estima que a lo largo de este año se ha triplicado el número de personas que tratan de buscar un sustento en las ventas informales, dado al cierre y la clausura de muchos comercios formales.
“Podemos estar hablando de más de 60.000 personas que ahora en la ciudad de Bogotá están tratando de generar un ingreso para sus hogares, un sustento para sus familias en las ventas informales esto supone un enorme desafío especialmente en la temporada de diciembre cuando más se puede vender”, explicó.
A la par, en la ciudad de Bogotá se iniciará un Plan Piloto con el IPES, para que los vendedores informales estén plenamente identificados con su documento y código QR. De esta manera, cualquier autoridad que adelante control en el espacio público y requiera verificar si determinado vendedor está autorizado y ubicado en el lugar acordado con el IPES, lo podrá hacer.
“Esta pandemia ha dejado muchas personas sin empleo. Los vendedores saldrán a la calle a buscar el sustento para sus familias, pero deben hacerlo de manera organizada. También les vamos a exigir porque el espacio público es de todos los que vivimos en Bogotá. Esto requiere de inteligencia colectiva y de autocontrol por parte de cada ciudadano. Por eso desde ya nos estamos preparando para habilitar estas zonas, para que haya más espacio y para que las ventas se hagan de manera segura” indicó Luis Ernesto Gómez, secretario de Gobierno.
Vigilancia estricta
Los vendedores podrán trabajar esta temporada pero cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad y autocuidado. La Secretaría de Gobierno, conjuntamente con las alcaldías locales, entregará 50.000 kits de bioseguridad a estos comerciantes, compuestos por tapabocas y gel antibacterial, y desplegará 2.700 gestores de espacio público en las diferentes localidades, quienes estarán dialogando y haciendo jornadas de sensibilización con vendedores y compradores para garantizar que se cumplan las medidas de autocuidado.
Por último, no se permitirá la utilización de ningún mobiliario estático o anclado en el espacio público, y el mobiliario debe tener unas dimensiones que en ningún momento pueda obstaculizar o bloquear el paso de peatones.