Argentina, ¿con la suerte del campeón en el Mundial de Catar? | El Nuevo Siglo
ARGENTINA regresó a entrenamientos tras la clasificación a octavos de final del Mundial de Catar.
/AFA
Jueves, 1 de Diciembre de 2022
Alejandro Munévar

Por Alejandro Munévar

Enviado especial EL NUEVO SIGLO

 

Con la victoria 2-1 de Argentina sobre Polonia, la ilusión volvió al campamento gaucho y aunque hay felicidad no es desmedida, pues desde la dirección técnica saben de las falencias que tiene el equipo. Sin embargo, los ánimos han cambiado drásticamente, pues de llegar eliminados al último partido de la fase de grupos, a clasificar primeros, es una demostración del trabajo que realizaron los últimos días, pero sobre todo de que la suerte en esta oportunidad los acompaña.

La situación de Argentina es compleja, ya lo hemos hablado. Juegan con la presión de ser siempre favoritos, algo que no es nuevo, pues desde la aparición de Diego Maradona en 1982 en la selección absoluta, la prensa y la gente se han encargado de que el equipo tenga la responsabilidad no solo de participar y tratar de ganar, sino de ganar sea cual sea el rival. Desde entonces y hasta ahora, siempre Argentina ha sido favorita, tengan o no con qué serlo.

Para este Mundial de Catar 2022, llegó con un invicto de más de 30 partidos, siendo campeones de América, todo en el marco de una serie de campañas publicitarias patrocinadas por la misma Asociación del Fútbol Argentino, en donde más que mostrar los logros de un equipo se hacía una oda a su capitán, Lionel Messi, algo que seguramente querían utilizar para amedrentar a los rivales pero no les funcionó, pues llegaron a Doha y en el primer partido se vieron sorprendidos por Arabia Saudita que, aparentemente, les perdió el respeto. Luego tuvieron que enfrentar a México, al que superaron, no ampliamente, pero lo importante en los mundiales no es el cómo, sino el qué y en este caso específico Argentina tenía que ganar.


Le puede interesar: Eliminaron a Alemania: no le alcanzó la victoria 4-2 frente a Costa Rica


Todo esto para llegar al último partido de la fase de grupos, en donde con posibilidades de quedar eliminados tenían que salir a ganarle a una Polonia que no representa sobre el papel ningún peligro. Les costó. Messi erró un penal regalado, porque aunque el VAR decidió cobrar una aparente falta, no existió. Los primeros 45 minutos Polonia supo aguantar; para el segundo tiempo, Mac Allister marcó su primer gol en un Mundial, luego Julián Álvarez convirtió el segundo y se llevaron la victoria. Celebración a rabiar, volvió la ilusión, los hinchas dejaron de estar asustados y regresó al ambiente la clásica confianza desmedida que caracteriza a los argentinos.

Pero ¿por qué esta nota se llamó “suerte de campeón”, si lo único que ha hecho hasta el momento es mostrar las falencias de Argentina? La respuesta está ahí mismo: a pesar de todo lo que han tenido en contra, los argentinos pasaron a segunda ronda, en donde enfrentarán a Australia, equipo que por segunda vez en su historia clasifica a octavos de final de un Mundial, un onceno sin mucha tradición, ni historia, tampoco recursos o desarrollo, así que si esto no es tener suerte, que mostrando el peor fútbol del año, porque esta no es la mejor Argentina que hemos visto, les toque Australia en octavos, no sé qué lo sea.