Propuestas de precandidatos sobre desempleo y deuda fiscal | El Nuevo Siglo
DOS DE los invitados al debate presidencial de ANIF: Óscar Iván Zuluaga del Centro Democrático y Gustavo Petro de Colombia Humana.
Miércoles, 1 de Diciembre de 2021
Redacción Política

En medio de la 36 Asamblea General de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, se realizó un debate con la presencia de nueve precandidatos a la Presidencia. El tema general fue “La economía en los próximos años. Retos económicos del nuevo gobierno”.

Uno de los aspirantes que participó de manera virtual fue Juan Carlos Echeverry, quien respondió al interrogante ¿Qué hacer con el empleo?

“Es equivalente a: ¿Qué hacer con la economía colombiana? Nosotros estamos obsesionados con la idea del crecimiento que realmente solo funciona para 10 millones de personas, mientras que la economía no funciona para 15 millones de personas: 10 millones de informales en el rebusque y cinco millones de mujeres que no pueden entrar al mercado laboral”, explicó.

Agregó Echeverry que “hay que mantener la afiliación a la salud subsidiada, movernos hacia un sistema de salud similar al de salud con un régimen subsidiado y contributivo. Desligar la formalización de las cotizaciones de seguridad social y pensión. Desligar los subsidios estatales de la vinculación laboral, eso impide que mucha gente quiera formalizarse, permitir la cotización por horas, permitir salarios diferenciales por departamentos, crear un sistema tributario con escalones pequeños que suba gradualmente de 2 en 2 y un aumento en el salario mínimo del 11%”.

Mientras que Gustavo Petro se preguntó: “¿Cómo puede crecer la economía 10% si la tasa de desempleo apenas baja un 1%? Algo está fallando en el cuadro. Y en el cuadro está fallando que se está midiendo mal el crecimiento económico. Lo medimos en dólares o en pesos, no lo medimos en puestos de trabajo. Si lo midiéramos en puestos de trabajo, detectaríamos que lo que estamos llamando crecimiento es básicamente un crecimiento de las importaciones que hace crecer el comercio por el lado de la oferta, pero que básicamente destruye empleo en Colombia, es decir, destruye economía y valor”.

Y reiteró que “ese es el modelo petrolero desde hace 40 años, pero que entró en su fase final a partir de 2015 y se está agotando, por tanto hay que cambiarlo. Cambiarlo por un modelo de producción del país, es decir, donde la agricultura, la construcción y la industria sea lo que más crezca. Y para ello hay que tomar en el corto plazo dos medidas, elevar aranceles a las importaciones que se pueden producir en Colombia en cuatro ramas: producción alimentaria, agroalimentaria e industrial, textiles y cueros. Esas cuatro ramas tienen millones de puestos de trabajo en Colombia y si se protegen del comercio internacional en el corto plazo, producirían millones de puestos de trabajo en Colombia”.

Agregó que “el segundo elemento de corto plazo es el trabajo garantizado por el Estado que se debe enfocar en la mujer y el joven. En la mujer sería clave remunerar las acciones de cuidado como de niños, salud, enfermos, etc. Y en el trabajo de jóvenes propondría la construcción de bienes comunes en la comunidad local, pero también un programa de vivienda que se enfoca de otra manera, que es poder hacer planchas en los tejados de las casas populares, 125 mil de ellas que da medio millón de puestos de trabajo locales”.

La capacitación

Mientras tanto, el precandidato Alejandro Gaviria propone desmontar el sesgo antiempleo que tiene la economía colombiana. “Una empresa carbonera o petrolera tiene más condiciones para operar que una empresa de confección. Le damos un castigo al empleo, favorecemos la acumulación de capital y eso tiene que desmontarse gradualmente. Yo quiero hacer otro énfasis en la mente de la gente, en la capacitación, en poner a funcionar el ecosistema de Colombia técnico y tecnológico para esa brecha de habilidades, esa paradoja de no hay empleo, pero al mismo tiempo no hay trabajadores que consiguen las empresas”.

Añadió que se debe "hacer un plan de choque, que 1,5 millones de jóvenes puedan capacitarse para que consigan empleo y tengan las habilidades necesarias. No es con proteccionismo; es, creo, con bienes públicos de calidad y con capacitación para romper la brecha de debilidad”.

Por su parte, Óscar Iván Zuluaga explicó cinco puntos. “Primero, una nueva fuerza laboral orientada hacia el trabajo y el emprendimiento, lo que implica una transformación de la educación media, grado 10 y 11, a través de un cambio del SENA para lograr la doble titulación de todos los bachilleres públicos en Colombia, no solo bachiller académico sino técnico profesional”.


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Explicó que otro punto  tiene que ver con un “plan de choque en los primeros seis meses del gobierno para formar en competencia a 500 mil jóvenes, 70% mujeres, 30% hombres, en temas de digitalización, automatización y demás, con una particularidad: con empleo garantizado al final de su ciclo de formación. Tercero, inglés desde la primaria en todos los colegios públicos, hacer realidad ese sueño de los jóvenes”.

Agregó: “Cuarto, construcción de jardines infantiles para hacer realidad la universalización de la primera infancia, que todo niño en Colombia jamás se acueste con hambre, que todo niño entre los 0 y 5 años reciba educación, estimulación temprana y reciba alimentación. Esta medida permitiría que un millón de mujeres queden con la posibilidad de poderse habilitar para generar ingresos y prepararse”.

Finalmente, el quinto punto que propone Zuluaga tiene que ver con un “régimen especial para estudiantes que puedan trabajar mientras estudian, y hacer una flexibilización laboral con el tema de horas y toda una consideración en el costo de la seguridad social”.

Encrucijada fiscal

Otro de los temas tratados durante el debate fue la encrucijada fiscal que vive el país. 

Echeverry dijo que los padres de familia no querrán comprar una casa, un carro; y los empresarios no querrán invertir si creen que sus ingresos no se van a mantener en el futuro. 

“La credibilidad  y el liderazgo del gobierno es fundamental, un mal liderazgo ahuyenta la credibilidad. Miren todos estos candidatos y pregúntense ¿quién es el que más ahuyentaría la confianza de los padres de familia y de los empresarios?”.

Para Petro el país tiene un enorme déficit fiscal y comercial, “eso contablemente no se puede resolver más que endeudando el país, que es lo que ha hecho Duque, o exportando gente para que manden remesas. Yo creo que esa no es la alternativa de Colombia. Tenemos que operar tanto en el déficit comercial en contexto de una economía que debe descarbonizarse, 10 años para eso, y reducir el déficit fiscal. En cuanto al fiscal, no veo otra alternativa que las 4.000 mayores fortunas del país paguen impuestos”.

Por su lado, Alejandro Gaviria expuso tres puntos. “Tasas efectivas de tributación iguales entre sectores y entre empresas; gravar la parte alta de la distribución, y estaría de acuerdo con Petro con un impuesto a los dividendos y a la riquezas;  y por último los impuestos saludables y sostenibles”. 

Mientras que Óscar Iván Zuluaga mantendría y fortalecería la autonomía del Banco Central. “Hay que llevar a que el país crezca al 5% de manera sostenida y un programa de transformación productiva sin renunciar al tema de los hidrocarburos y minerales, que son un factor de estabilidad de las finanzas públicas”, dijo.