¿Perdurará alianza de liberales, La U y C. Radical? | El Nuevo Siglo
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Lunes, 18 de Noviembre de 2019
Redacción Política
Las tres bancadas hicieron sentir la semana pasada sus mayorías en el Congreso; ¿pero se trata de una nueva coalición legislativa o solamente de una unión coyuntural? ¿Volverá a hablarse de la “reunificación liberal”?

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La semana pasada, durante la sesión del Congreso en pleno, las bancadas de los partidos Cambio Radical, Liberal y Social de Unidad Nacional (La U) se erigieron como las ganadoras del pulso político por la vacante en el Consejo Nacional Electoral (CNE).

La votación por el candidato de esa ‘triada’ partidista terminó, con el apoyo de otras bancadas, con 88 votos a favor en Cámara y 51 en Senado.

Una semana antes, Alexander Vega logró ser elegido registrador nacional gracias a estas colectividades.

Se trata de una alianza que a la hora de votar se manifiesta autosuficiente. La U tiene 14 senadores y 25 representantes. Cambio Radical tiene 16 congresistas en Senado y 30 en Cámara. Y el Partido Liberal cuenta con 14 senadores y 35 representantes. Sumados por corporación, las tres bancadas tendrían 44 curules en Senado y 90 en Cámara. Es decir, mayoría simple en uno y mayoría calificada en el otro.

Se puede decir que lo que empezó con dos organizaciones políticas que se declararon independientes del Gobierno (Cambio Radical y Partido Liberal) terminó con una fuerza mayoritaria en el Congreso, que además en algunas ocasiones logran el respaldo de las colectividades opositoras.

 

Fragmentación

Según el profesor de la Maestría en Comunicación Política de la Universidad Externado de Colombia, Carlos Arias, “hay un bloque que es innegable entre las tres colectividades, pero esta está dividida en dos. Hay una alianza de oposición que le está diciendo al Gobierno ‘si no nos da la mermelada nosotros le ponemos palos en la rueda y terminamos poniendo en cargos importantes personas nuestras’. Hay una segunda dimensión que es que el Gobierno, por el otro lado, intenta buscar alianzas en algunas facciones de los partidos. Si bien no logra cooptar la institucionalidad de la colectividad, intenta fraccionar esas alianzas. Lo que pasó con Claudia Blum, pues ella fue fundadora de Cambio Radical, cercana al uribismo y exdiplomática del anterior gobierno y puede ayudar a esa fragmentación”.

Agregó que “mi lectura es que el Gobierno intenta jugar sus fichas intentando fraccionar a los partidos desde dentro, nombrando gente del partido por aparte para mostrarle los dientes a la institucionalidad del partido, para decirles: no se me opongan en bloque, porque si no yo termino dándole la mermelada a unos pocos y eso que tanto me reclaman termina en manos de personas del partido que sí quieren jugársela conmigo”.

Además, sostuvo que una alianza duradera dependerá “de cómo jueguen las cartas las personas de La U que se pueden sumar al Gobierno. Hay un caso que me llama la atención y es el de Dilian Francisca Toro que termina su mandato el 31 de diciembre. Queda libre. Tiene bancada propia. O los Char, que tienen su propia bancada. Y que a pesar de pertenecer a la institucionalidad, pueden ser merecedores de una parte de la mermelada y eso quebraría a la institucionalidad tanto de La U como de Cambio Radical”.

 

Gobernabilidad

 

Sin embargo, el analista político Alejo Vargas descartó que vayan a poner palos en la rueda, pues “ellos le han estado ofreciendo al presidente un acuerdo político para establecer un acuerdo de gobernabilidad en el Congreso, pero son tres colectividades que han tenido muchas cercanías en el Congreso empezando por el tema de paz. Es probable que eso se mantenga y sumándole a esto la posición de los partidos de oposición, lo que coloca al Gobierno en una minoría para el trámite de su agenda”.

Para Vargas, “es equivocado por parte del presidente Iván Duque no llegar a acuerdos con los partidos, porque en todas partes del mundo este tema es de votos, porque si se quieren elegir determinados funcionarios eso pasa por llegar a acuerdos. No se puede pretender que porque el presidente diga una cosa le van a hacer caso. Eso es equivocado y llevaría a que el Gobierno se aísle de estos casos de nombramientos”.

 

Coyunturas

A su turno, Viviana Clavijo, profesora de Ciencia Política y Márketing Político de la Universidad del Rosario, indicó que “con el comportamiento de nuestros partidos es muy difícil decir que vaya a durar la alianza, porque vemos que nuestros partidos se mueven más por fenómenos políticos coyunturales, pero es muy difícil de terminar la durabilidad de este tipo de alianzas. Además responden a objetivos electorales y van en el mismo rumbo que va la opinión”.

En ese sentido, Vargas consideró que “es muy difícil prever que esta alianza sea permanente. Sin embargo, hay sectores en estos partidos que están haciendo un esfuerzo a ver si son la base de una gran coalición esperando las elecciones de 2022, pero todavía falta mucha agua bajo el río”.

Por otro lado, Mauricio Jaramillo Jassir, profesor de Ciencia Política de la Universidad del Rosario, expresó que los cálculos de La U, Cambio Radical y los liberales son que “ellos solos tienen muy poca influencia y es muy difícil que una colectividad ponga presidente. Esto nace en la coyuntura con miras al próximo periodo electoral. Con Duque, el gran problema es que el Gobierno ha tenido una desaprobación enorme en muy poco tiempo. En las elecciones regionales hubo un voto castigo al oficialismo. Me parece que lo que hacen los partidos es tratar de aprovechar este momento y lanzarse al ruedo, pero eso cambia mucho”.

Sumado a esto, Jaramillo anotó que es difícil saber si una alianza va para largo, “porque el Partido Liberal tiene varias facciones y es difícil prever las compatibilidades con un partido como Cambio Radical que tiene un discurso muy claro. Vargas Lleras es mucho más cercano a la centro derecha y en los liberales están muy cercanos al progresismo. La U es un partido muy flexible”.

Por último, Juan Carlos Ruiz, también profesor del Rosario expuso que una coalición de largo plazo es muy difícil que se dé por la falta de disciplina de los partidos: “Hay matrimonios de conveniencia en ciertos casos. Incluso en la moción de censura así lo hicieron, pero al interior de los partidos no existe tal bloque. Incluso al interior de ellos están fragmentados. Eso no puede permanecer en todos los casos y temas. Yo los veo distanciados. El solo hecho que tengan su tolda aparte y que no quieran volver a unificarse con el Partido Liberal, en el caso de La U y Cambio Radical demuestra que tienen intereses particulares”.