Censura | El Nuevo Siglo
Sábado, 7 de Noviembre de 2020

En lo que va corrido del actual periodo presidencial, el uso o la amenaza de uso de la moción de censura les ha reportado a las fuerzas de oposición política notables dividendos al enfocarse en los ministros de Justicia y Defensa.

De hecho, el actual ministro, Carlos Holmes Trujillo, se encuentra inmerso en una nueva dinámica de esta naturaleza, tanto en Cámara como en Senado, lo que muestra el ímpetu con que, en esta ocasión, se está buscando la salida del funcionario.

En primer término, la iniciativa de censura busca limitar el margen de acción del jefe de la cartera, es decir, su desempeño y el grado de aceptación ciudadana con respecto a las decisiones que toma.

De hecho, la opinión sobre el Ministro sufrió una inversión negativa al pasar de un 27 % a favor / 24 en contra en la medición de Invamer - Gallup practicada en enero del 2019, al 32 en contra / 23 a favor en junio de este año; y la fluctuación, en general, ha resultado poco alentadora.

De igual modo, el proyecto de censura parece muy relacionado con el rol que él juega en el partido Centro Democrático y su perfil como eventual candidato oficialista en las elecciones presidenciales del 2022.

Y aunque apenas registra un deprimente y desolador 1 % en intención de voto, la oposición parece verse muy motivada por la posibilidad de disminuir a toda costa su influencia, interrumpiendo desde ahora el ciclo natural de una probable candidatura.

Probable candidatura que, en todo caso, se verá muy desafiada, primero, por sectores de la derecha absoluta y razonablemente inconformes con la gestión de Duque; y, segundo, por unos resultados que muestran a sus adversarios, Sergio Fajardo y Gustavo Petro, en los primeros lugares de medición : 20 - 16 % en un caso [ CNC ] y 18 - 13 en el otro (Ecoanalítica).

En cualquier caso, la pertinacia de la oposición en este asunto lleva a colegir que la situación del Ministro no es la más holgada y que, independientemente de las cifras, su posición en el tablero gubernamental podría tornarse insostenible, más aún, si se tiene en cuenta que el panorama de orden público estará muy ligado a los sucesos que lo han llevado a padecer la presente crisis.

Para decirlo claramente, solo una estimación anticipada de los resultados de la votación en ambas cámaras determinará la continuidad de Trujillo en el cargo, pues el Gobierno no se expondrá a un fracaso anunciado.

En conclusión, la moción no solo reduce el margen de maniobra institucional del Ministro sino también su ámbito de acción política y, particularmente, la arquitectura de la seguridad y la defensa.

Así, pues, el país se halla frente a un modelo de protesta que puede estar deliberadamente distorsionado y que será, en sus variantes destructivas, el más utilizado por los grupos ilegales para tratar de desestabilizar al país cambiando el modelo democrático liberal por uno absolutamente diferente.

* Profesor de la Escuela Superior de Guerra.

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