10 retos para el nuevo Alcalde de Bogotá | El Nuevo Siglo
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Sábado, 26 de Octubre de 2019
Redacción Bogotá
El elegido  como el Mandatario de los bogotanos tendrá que asumir inmediatamente diferentes problemas que son urgentes para la ciudadanía

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La persona que llegue a asumir el monumental reto de administrar una ciudad de las dimensiones, características y problemáticas que tiene la capital del país, tendrá que apagar incendios por todos los frentes. Deberá llevar a buen puerto obras clave para mejorar la movilidad y la calidad de vida de los ciudadanos, y tendrá que hacerlo contemplando los principios medioambientales que hoy por hoy rigen la agenda mundial.

Pero, ¿cuáles son los 10 principales retos que llega a asumir el próximo administrador/a de la capital colombiana? Basados en dos informes, uno de la Cámara de Comercio y otro de Probogotá, EL NUEVO SIGLO los ha resumido de la siguiente manera.

  1. Inseguridad

En materia de seguridad ciudadana, Bogotá ha logrado una reducción histórica en la tasa de homicidios, de acuerdo con el Informe Forensis 2019 del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. No obstante, aún hay grandes retos en la reducción de delitos contra el patrimonio, particularmente del hurto a personas. La ciudad también debe avanzar en la desarticulación de las bandas criminales.

La próxima Administración deberá reducir la tasa de homicidios a un dígito y el número de casos a menos de mil homicidios al año. Asimismo, reducir a 55% las víctimas directas de hurto a personas; aumentar en 10 puntos porcentuales el número de ciudadanos que considera que su barrio es seguro e incrementar la confianza en la Policía Metropolitana.

  1. Falta de movilidad y ejecución del Metro

La movilidad de Bogotá es una de las quejas más apremiantes de los capitalinos. No solo por la congestión vehicular sino porque hay un significativo atraso en la infraestructura del transporte público. De acuerdo con Probogotá, de los 380 Km de troncales de Transmilenio proyectados a finales de los 90, solo se han construido 114 Km, y el índice Inrix, estimó que los que usan el vehículo particular perdieron 272 horas en trancones por persona al año durante 2018.

El nuevo Alcalde deberá ejecutar las obras de expansión de la red de infraestructura de movilidad, ampliando por ejemplo los accesos por la Autopista Norte, la Carrera Séptima y destrabar las obras de la ALO, Tramo Sur, entre otras.

Además de implementar una política de logística y abastecimiento, y de diseñar e implementar estímulos de movilidad sostenible y energías limpias, el próximo Burgomaestre de la capital de la República deberá ejecutar la Primera Línea del Metro y asegurar los diseños de las próximas líneas, así como del sistema de trenes de la ciudad.

 

  1. Gobernabilidad

El próximo Administrador de la capital del país deberá sostener buenas relaciones con el Gobierno nacional para llevar a buen puerto todas las obras y proyectos que se desarrollan entre la Casa de Nariño y el Palacio Liévano.

Si algo quedó claro con la Alcaldía de Gustavo Petro, es que la falta de comunicación entre los dos cargos afecta la gestión distrital y dificulta la aplicación de programas de carácter nacional en la ciudad. Por ello, el alcalde Enrique Peñalosa se encargó de fomentar las buenas relaciones y el diálogo, y de ahí que se pudieran consolidar proyectos como la Primera Línea del Metro y la reactivación de programas como Casas Gratis.

  1. Consolidación de Bogotá-Región

Bogotá y su región circundante se han constituido como la aglomeración más competitiva del país. De acuerdo con Probogotá, su PIB representó en 2018 el 30,77% del total nacional, es decir US$101,6 mil millones, superando el de países como Uruguay.

Esta dinámica económica y social ha consolidado un modelo ineficiente de ocupación del suelo producto de los movimientos migratorios hacia Bogotá y su entorno metropolitano, y la próxima Administración deberá liderar la creación de una Región Metropolitana de la Sabana.

  1. Medio ambiente y calidad del aire

La próxima Administración deberá darle continuidad a todas aquellas obras que demanda la ciudadanía pero sin desproteger la estructura ecológica principal, los Cerros Orientales, la Reserva Van Der Hammen, la recuperación del Río Bogotá y todas las fuentes hídricas de la capital del país.

¿Clave? Mitigar los niveles de polución del aire (causado mayoritariamente por la utilización de los combustibles fósiles en el sector productivo, en el transporte terrestre y aéreo, y en la industria manufacturera y de carga).

  1. Finanzas

La capital tiene una buena capacidad para generar ingresos a partir de recursos propios. No obstante, es preocupante la alta dependencia de las finanzas de la ciudad de los impuestos a la actividad económica. Esto se debe a la alta participación del ICA, el predial y la sobretasa a la gasolina en el recaudo tributario. El próximo Gobierno deberá simplificar la estructura tributaria distrital, buscar fuentes alternativas de ingresos fiscales y crear el mecanismo de financiamiento por impuestos futuros.

  1. Migración venezolana

La capital de la República ha recibido al 21% del total de migrantes que han llegado al país (alrededor de 1.359.815). Bogotá deberá definir e implementar una estrategia para la inclusión productiva de la población migrante.

  1. Implementación del POT

El POT, tan ampliamente discutido y analizado tanto por el Distrito como por el Concejo, entrará en vigencia el próximo año y será rol de la próxima Administración, comenzar con su ejecución.

  1. Salud

Los cambios adelantados en el sistema de salud de Bogotá en los últimos años son importantes y deben ser fortalecidos en el próximo período de gobierno, sobre todo para para satisfacer la demanda de atención en salud. La próxima Administración deberá fortalecer el sistema de servicios digitales en salud, aumentar los Centros de Atención Prioritaria y darles continuidad a las obras de infraestructura hospitalaria.

  1. Inequidad

Si bien Bogotá logró reducir los niveles de pobreza, aún tiene retos importantes para superar los índices de desigualdad. De acuerdo con cifras del Boletín Técnico de Pobreza Monetaria en Colombia que realiza el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), en 2018 la capital fue la tercera ciudad con el Índice de Gini más alto (0.50) después de Riohacha y Quibdó.

El próximo Alcalde deberá reconocer que hay grupos como las mujeres, los jóvenes, los migrantes y la población afectada por el conflicto armado que presentan una vulnerabilidad económica y social alta.