La nostalgia por la pantalla grande | El Nuevo Siglo
“Los Fabelman”, la película con la que Spielberg vuelve a su infancia.
UIP
Jueves, 29 de Septiembre de 2022
Redacción Cultura

Por Sandra Ríos, creadora de www.CineVistaBlog.com

¡Es una realidad! Tras la pandemia, el cine exhibido en la gran pantalla ha visto reducida significativamente la asistencia. Los espectadores cambiaron el gran formato por la sensación de seguridad que ofrecen las plataformas. Durante la crisis, se hablaba de que un 70% de la audiencia, según un estudio de Performance Research de Estados Unidos, sentía temor de ir a una sala de cine. ¡Y se acostumbraron! En dos años de la entrada masiva de las plataformas a los  hogares del mundo, se acostumbraron a los estrenos semanales, a decidir ellos mismos qué ver, cómo verlo, cuándo y en dónde.

Cuando el cine pasó de la proyección mayoritaria del 35 mm al digital, en 2010, hubo esa sensación de pérdida que ha vuelto ahora con los cambios en el modelo de exhibición. Cada vez es más común que una película, tras pasar por cartelera, al mes, mes y medio o máximo dos, se pueda ver en estos servicios streaming. Cineastas influyentes de la industria, como Martin Scorsese, James Cameron, Christopher Nolan y Pedro Almodóvar, han defendido con ahínco la vitrina de exhibición tradicional, que no se traduce solamente en películas de grandes efectos, secuelas y sagas interminables, sino en esas inolvidables historias.

El fantástico Steven Spielberg estrena este año “The Fabelmans”, una historia semibiográfica sobre su niñez, en la que introduce a un personaje de ficción llamado Sammy Fabelman, un joven aspirante a director. La película ya obtuvo su primer reconocimiento hace pocos días, con el premio de la audiencia en el Festival de Toronto. La producción ha dicho que es un "retrato profundamente personal sobre la infancia estadounidense del siglo XX, una historia sobre el crecimiento y la madurez de un joven al descubrir un demoledor secreto familiar y la exploración del poder del cine para ayudarnos a ver la verdad sobre los demás y sobre nosotros mismos".  



En la conferencia de prensa que dio en el evento, Spielberg aseguró que este ha sido el proyecto más abrumador de toda su carrera, que comenzó a escribir en los inicios de la pandemia, en un ejercicio donde recopiló recuerdos no solo propios, sino de sus padres y hermanas. En el rodaje, ha recreado varias de las películas reales que filmó en 8 mm cuando era adolescente. Las primeras imágenes conocidas justamente muestran esa magia que solo el cine en la gran pantalla es capaz de lograr, donde la luz hace parte del engaño óptico que imperceptiblemente transforma cuadros estáticos en movimiento.

“Las luces cambian la apariencia de las cosas”, dicen en la película de Spielberg, algo que coincide y resalta también el nuevo largometraje de Sam Mendes (“Skyfall”, “1917”), “Imperio de luz”, donde un proyeccionista de una vieja sala explica la mística de la proyección: “Ahí afuera solo ven un rayo de luz y nada ocurre si no hay luz”. Mendes dirige y escribe, por primera vez en solitario, esta historia que se ambienta en los ochenta y de la que han querido revelar poco, más allá de ser descrita como una historia muy conmovedora y poderosa “sobre la conexión humana y la magia del cine, el poder de la narración y de las películas, específicamente la emoción de ver una película en una sala oscura y los placeres táctiles del celuloide”. También presentada en el festival canadiense, ambos largometrajes seguramente harán parte de la temporada de premios 2022-2023. La de Spielberg, la anticipan con múltiples nominaciones y galardones, mientras que la de Mendes ha llamado la atención especialmente por su protagonista, la extraordinaria Olivia Colman, de quien han alabado una vez más su actuación y quien termina brillando, al parecer, por encima de la propia historia.

El cine dentro del cine es uno de los disfrutes máximos del buen cinéfilo y, gracias a estos dos grandes del séptimo arte, podremos volver a las salas a deleitarnos con el cine de buenas historias y, de paso, a no olvidar que, como dice la madre en “Los Fabelman”: “Las películas son sueños que nunca se olvidan”.