En Policarpa, Nariño, población obligó al Ejército a retirarse | El Nuevo Siglo
Foto AFP
Lunes, 14 de Septiembre de 2020
Redacción Nacional

Una delicada situación de orden público se registró en las últimas horas en el municipio de Policarpa, en Nariño, donde centenares de habitantes obligaron a las unidades del Ejército que hacían presencia en la zona a retirarse del casco urbano de la población.

Al parecer, y de acuerdo con las denuncias que se conocieron ayer, la población habría sido presionada por los grupos armados al margen de la ley que operan en el sur del país para hostigar a los uniformados a fin de que se retiren del casco de Policarpa.

La situación comenzó en horas de la tarde del sábado, cuando la ciudadanía salió de sus casas y rodeó a los uniformados, a arengarlos y a exigirles que se retiren del lugar.

El Ejército rechazó la agresión de la que fueron objeto los soldados de la Brigada XXIII que cumplen labores de erradicación en Policarpa, Nariño.

Luego, decenas de motociclistas hostigaron a los militares para subirse a los camiones de la institución, y posteriormente escoltaron los vehículos hasta que salieron del municipio.

Cerca de 200 militares habían llegado a Policarpa desde el pasado 2 de septiembre para combatir a los grupos ilegales dedicados a actividades del narcotráfico en esa parte del departamento.

Sobre esta situación el Comando de la Tercera División del Ejército confirmó que “en las últimas horas moradores de la vereda Santacruz, del municipio de Policarpa, Nariño, impidieron, mediante asonada, la labor de erradicación y control territorial que adelantaban soldados de la Vigésima Tercera Brigada. Los soldados, en cumplimiento de su deber constitucional, buscan afectar la cadena del narcotráfico en uno de sus eslabones: el cultivo de drogas ilícitas”.

La Institución señala que el hecho ilegal fue cometido por las personas de la zona y “tenía como objetivo obstaculizar y detener las labores de erradicación que se adelantan en los diferentes municipios de la Cordillera, y podría estar relacionado con otros eventos que se registran en diferentes sectores del país”.

Así mismo, el Ejército advirtió que con el fin de evitar confrontaciones que pudieran afectar a la comunidad “se tomaron decisiones operacionales para brindar protección efectiva a la población, teniendo en cuenta que en la zona hay presencia del grupo armado organizado residual ‘Estructura 29 Estiven Gonzales’ y ‘Clan del Golfo Cordillera Sur’”.

La Tercera División anunció que este hecho será puesto en conocimiento de las autoridades competentes para que se adopten las acciones judiciales a que haya lugar.

“Invitamos a las comunidades que tienen en sus tierras cultivos ilícitos a que unidos erradiquemos lo que genera violencia y pobreza en las regiones, para que sembremos futuro. Las operaciones continuarán para contrarrestar el accionar de los grupos ilegales en la región y que se usufructúan de los cultivos ilícitos y en general del narcotráfico”, señala la información oficial.

Varios líderes de la región les pidieron ayer a las autoridades militares que regresen al casco urbano de Policarpa, pues de lo contrario toda la población quedaría a merced de los grupos armados al margen de la ley.

“Rechazamos contundentemente estos hechos, vemos a las autoridades pisoteadas, pedimos a las autoridades retomar la seguridad”, dijo una de las líderes comunales.

Por su parte, Francisco Cerón, Secretario de Gobierno de Nariño, tras rechazar el hostigamiento a la fuerza pública anunció que se realizará en las próximas horas un consejo extraordinario de seguridad para analizar la situación de orden público.

“La situación de orden público y los últimos hechos que se han presentado en nuestros municipios de Cordillera hacen que la administración departamental cite a un consejo extraordinario de seguridad en las próximas horas”, señaló el funcionario.

Esta crisis de seguridad en Policarpa se registró de forma simultánea a la sesión de la Comisión de Paz del Senado que se trasladó el sábado al vecino municipio de Samaniego, donde se analizó la situación de seguridad tras la masacre de ocho jóvenes hace un mes.