Cigarrillos eléctricos, incluso sin nicotina, dañan vasos sanguíneos | El Nuevo Siglo
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Viernes, 23 de Agosto de 2019
Agencia Europapress
Los solventes, saborizantes y aditivos, después de la vaporización, exponen a los usuarios a múltiples problemas en el tracto respiratorio

 

Fumar cigarrillos electrónicos se ha comercializado como una alternativa segura a los cigarrillos de tabaco y está aumentando su popularidad entre los adolescentes no fumadores. Sin embargo, vapear pueden ser dañino para los vasos sanguíneos, incluso cuando el vapor está completamente libre de nicotina, según un nuevo estudio publicados este martes en la revista 'Radiology' realizado por investigadores de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos).

Para estudiar el impacto a corto plazo del vapeo, los investigadores realizaron exámenes de resonancia magnética en 31 adultos sanos y no fumadores antes y después de vapear un cigarrillo electrónico sin nicotina. Comparando los datos previos y posteriores, un episodio único de vapeo provocó un flujo sanguíneo reducido y una función endotelial deteriorada en la arteria femoral que suministra sangre al muslo y la pierna.

El endotelio, que recubre la superficie interior de los vasos sanguíneos, es esencial para una circulación sanguínea adecuada. Una vez que el endotelio está dañado, las arterias se engrosan y la sangre fluye hacia el corazón y el cerebro puede cortarse, lo que provocaría un ataque al corazón o un derrame cerebral.

"Si bien el líquido del cigarrillo electrónico puede ser relativamente inofensivo, el proceso de vaporización puede transformar las moléculas, principalmente propilenglicol y glicerol, en sustancias tóxicas --dice el investigador principal del estudio, el doctor Felix W. Wehrli, profesor de Ciencia Radiológica y Biofísica en la Universidad de Pensilvania--. Más allá de los efectos nocivos de la nicotina, hemos demostrado que el vapeo tiene un efecto repentino e inmediato en la función vascular del cuerpo y podría conducir a consecuencias perjudiciales a largo plazo".

Los cigarrillos electrónicos son dispositivos que funcionan con baterías que convierten el líquido en aerosol, que se inhala en los pulmones del usuario. Habitualmente, el líquido contiene nicotina, así como sabores. Más de 10 millones de adultos en los Estados Unidos usan cigarrillos electrónicos, y el vapeo se ha vuelto especialmente popular entre los adolescentes. Si bien parece haber cierto consenso de que el vapeo puede ser menos dañino para la salud que fumar cigarrillos de tabaco, los peligros de los cigarrillos electrónicos siguen sin estar claros.

En este estudio, los investigadores examinaron el impacto de un cigarrillo electrónico que contenía propilenglicol y glicerol con sabor a tabaco, pero no nicotina, del cual los participantes del estudio tomaron 16 inhalaciones de tres segundos. Para evaluar la reactividad vascular, el grupo contrajo los vasos del muslo con un manguito y luego midió la velocidad en la que fluyó la sangre después de su liberación. Usando un procedimiento de IRM multiparamétrico, los investigadores escanearon la arteria y la vena femorales en la pierna antes y después de cada episodio de vapeo para ver cómo cambió la función vascular.

Posteriormente los investigadores realizaron un análisis estadístico para determinar las diferencias grupales en la función vascular antes y después del vapeo. Observaron, en promedio, una reducción del 34 por ciento en la dilatación de la arteria femoral.

La exposición a los cigarrillos electrónicos también condujo a una reducción del 17,5 por ciento en el flujo sanguíneo máximo, una reducción del 20 por ciento en el oxígeno venoso y una reducción del 25,8 por ciento en la aceleración de la sangre después de la liberación del manguito, la velocidad a la cual la sangre volvió al flujo normal después de siendo restringido.

Estos hallazgos sugieren que el vapeo puede causar cambios significativos en el revestimiento interno de los vasos sanguíneos, explica la autora principal del estudio, la doctora Alessandra Caporale, investigadora postdoctoral en el Laboratorio de Imágenes Estructurales, Fisiológicas y Funcionales en Pensilvania.

"Los cigarrillos electrónicos se anuncian como no dañinos, y muchos usuarios están convencidos de que solo están inhalando vapor de agua --dice Caporale--. Pero los solventes, saborizantes y aditivos de la base líquida, después de la vaporización, exponen a los usuarios a múltiples problemas en el tracto respiratorio y los vasos sanguíneos".

Wehrli señala que observaron estos cambios sorprendentes después de que los participantes (todos los cuales nunca habían fumado previamente) usaron un cigarrillo electrónico una sola vez. Se necesita más investigación para abordar los posibles efectos adversos a largo plazo del vapeo en la salud vascular, pero predice que los cigarrillos electrónicos son potencialmente mucho más peligrosos de lo que se suponía anteriormente. A principios de este año, por ejemplo, su grupo de investigación descubrió que la exposición aguda a los cigarrillos electrónicos causa inflamación vascular.

"Advertiría a los jóvenes que ni siquiera comiencen a usar cigarrillos electrónicos. La creencia común es que la nicotina es lo que es tóxico, pero hemos descubierto que existen peligros, independientemente de la nicotina --dice Wehrli--. Claramente, si hay un efecto después de un solo uso de un cigarrillo electrónico, entonces puede imaginar qué tipo de daño permanente podría causar después de vapear regularmente durante años".