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Sábado, 22 de Junio de 2019
Redacción Política

Estatuto de Oposición

 

La bancada de partidos que están contra el Gobierno quiere realizar una especie de corte de cuentas a lo que fue este primer año de vigencia del Estatuto de la Oposición. Para varios de los parlamentarios de movimientos de izquierda es claro que no fue posible utilizar durante este primer tramo todas las herramientas que el Estatuto da como garantías para que se pueda efectuar un eficiente contrapeso a la Casa de Nariño y sus mayorías. Si bien es cierto que el Consejo Nacional Electoral (CNE) reglamentó la norma, para varios parlamentarios de este bloque el gran problema es que muchos de los derechos y garantías que se les reconocen en el estatuto dependen de la voluntad de las directivas del Senado y la Cámara, y allí el bloque contradictor es minoritario. “…Quedamos en un tono rogativo frente a las presidencias de Senado y Cámara, cuando se supone que el espíritu de la ley es que las garantías deben ser automáticas y sin dilaciones”, dijo un parlamentario de la oposición, que pidió la reserva de su nombre para no adelantársele al balance general que haga esa bancada.

 

CNE lo reglamentó

 

Lo cierto es que en enero pasado, el CNE aprobó la Resolución N° 3134 de 2018, mediante la cual se reglamentó la Ley 1909 de 2018 del Estatuto de la Oposición, estableciendo las pautas de financiamiento, acceso a medios de comunicación y garantías para los partidos que con personería jurídica se declaren formalmente en contradicción al gobierno de turno. Dentro de los aspectos que se reglamentaron estuvo el de que todos los partidos y movimientos políticos declarados en oposición tendrán acceso de manera equitativa a los medios de comunicación para controvertir las alocuciones que hagan funcionarios de alto gobierno. En este aspecto, los partidos de oposición se quejaron de que hubo algunos pronunciamientos presidenciales que por no ser alocuciones formales del Presidente, impidieron que el bloque contradictor le pudiera hacer la respectiva réplica.

 

De Robledo a Petro

 

“…Hay derechos que quedaron a medias… Por ejemplo, la curul de la candidata vicepresidencial quedó en el limbo por una nulidad dictada por el Consejo de Estado y no hubo semana en que desde las toldas del uribismo no se tratara de sacar del Senado a Gustavo Petro, al punto que incluso se le quiso frenar hasta la posibilidad de recibir los dineros por reposición de votos… Es claro que la norma de darle al tiquete perdedor en segundo vuelta dos cupos automáticos en el Congreso está muy lejos de ser admitida por el establecimiento político”, dijo la misma fuente parlamentaria de la oposición en charla con un periodista de EL NUEVO SIGLO.

 

Falta mucho

 

Según el congresista hay aspectos de la reglamentación del CNE que por ser recientes no han tenido una aplicabilidad plena. Citó como ejemplo la obligación para esa entidad de crear una comisión de monitoreo para revisar que se cumplan los derechos a réplica y acceso a medios de comunicación. También dijo que no se ha cumplido a cabalidad otro aspecto del Estatuto como aquel que le permite a los partidos y movimientos declarados en oposición a tener derecho al acceso a la información y documentación oficial, dentro de los cinco días siguientes a la respectiva solicitud. “…Seguimos sin tener esa prioridad o las respuestas que nos envían desde las entidades oficiales son muy generales, sin la especificación y los detalles que requerimos para poder adelantar los debates de control político”, precisó el parlamentario consultado. También trajo a colación que “hace parte del respeto a la oposición” que las mesas directivas garanticen la altura en los debates “… pero se toleraron muchos insultos y acusaciones injustas y graves para los que ejercemos la oposición y nos jugamos por la defensa del acuerdo de paz… Nos tacharon de todo, incluso de proclives al terrorismo”.