Su rechazo y su solidaridad ante el atentado a la Brigada 30 del Ejército Nacional en la ciudad de Cúcuta que dejó 36 personas heridas manifestó la Conferencia Episcopal de Colombia a través de un comunicado.
"Siguiendo la enseñanza de la Iglesia, los Obispos proclamamos que nada justifica estos actos demenciales y ciegos, que hieren profundamente la dignidad humana y constituyen una ofensa gravísima contra la humanidad entera, pues son una de las formas más brutales de la violencia", señalaron los jerarcas católicos.
Asimismo, los obispos ofrecieron sus oraciones por los afectados en este atentado y extendieron su saludo de cercanía a los familiares de las víctimas, al presidente Iván Duque, a los miembros de la Fuerza Pública y a la comunidad cucuteña en general.
De igual manera, dirigieron un saludo fraterno a monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, obispo castrense de Colombia y a todos los fieles del Obispado, así como a monseñor José Libardo Garcés Monsalve, administrador apostólico de Cúcuta, y a su Iglesia diocesana.
Finalmente, los prelados invitan a la comunidad católica a mantener en sus intenciones de oración el cese de la violencia y pedir "para que el pueblo colombiano unido pueda vencer el mal a fuerza de bien".