Fútbol prende lentamente | El Nuevo Siglo
Lunes, 25 de Mayo de 2020
  • Europa reactiva ligas, A. Latina debe esperar
  • Las diferencias estacionales por la pandemia

 

“Algunas personas creen que el fútbol es una cuestión de vida o muerte, estoy muy decepcionado con esa actitud. Puedo asegurarles que es mucho, mucho más importante que eso”. Esas palabras son de Bill Shankly, uno de los más famosos entrenadores británicos del siglo pasado. Con el pasar de los años pasó a convertirse en una frase célebre sobre lo que es el deporte más practicado y seguido en todo el planeta. Esa clase de percepciones son las que explican por qué la suspensión global de las ligas profesionales, campeonatos internacionales y eliminatorias mundialistas debido a la pandemia del Covid-19 ha impactado de forma tan sustancial a una parte importante de la humanidad. Incluso, dentro de los análisis sociológicos sobre la forma en que la emergencia sanitaria cambió de forma drástica la cotidianidad de varios miles de millones de personas, la ausencia del espectáculo del fútbol ha sido calificada como uno de los elementos que más produce ansiedad e incertidumbre entre la población que se encuentra limitada en su movilidad o sometida a otra serie de restricciones sanitarias adoptadas como fórmula para disminuir lo más posible el riesgo de contagio de este coronavirus.

En Europa, en donde el pico de pandemia ya pasó y las distintas naciones están en pleno proceso de reactivación productiva así como de normalización gradual de las actividades sociales, laborales, académicas, deportivas y de entretenimiento, el balompié también empezó a retomar su ritmo. De hecho, desde el pasado 16 de mayo se reanudó el campeonato alemán, aunque sin público en los estadios y aplicando estrictos protocolos sanitarios a los jugadores, equipos técnicos y demás personal logístico que se requiere para poder adelantar los encuentros y transmitirlos. En Italia, Inglaterra y otras naciones ya se autorizaron los entrenamientos grupales y se definen fechas para volver oficialmente a las canchas. Incluso, la liga española, sin duda una de las más seguidas en todo el mundo, ya anunció que el 8 de julio retomará su torneo, igualmente con estadios vacíos. Debe tenerse en cuenta que las precauciones en el viejo continente son muy altas, ya que varios partidos en marzo fueron señalados como disparadores puntuales de las tasas de contagio del virus en algunas naciones.

Paradójicamente hay países, como Bielorrusia, en donde el fútbol no se interrumpió y otros campeonatos que se reanudaron antes de la Bundesliga, como el de las Islas Feroe. También han retomado ligas pequeñas como las de Estonia y República Checa, este fin de semana. Lo harán en los próximos días las de Dinamarca, Serbia, Austria, Portugal, Eslovenia y Croacia, todas antes de dos semanas. Luego vendrían las de España, Turquía, Noruega y Rusia, entre otras. Dos de los torneos de primer nivel, como Italia e Inglaterra, aun no fijan fecha para reanudar pero muy seguramente será en junio, en tanto que otros países en donde se canceló el campeonato o se dio por terminado de manera anticipada debido al parón general por la pandemia, como Francia y Holanda, tienen un margen mayor de tiempo para retomar entrenamientos de cara al segundo semestre.

En América, Nicaragua fue el único país que no suspendió el campeonato, aunque hay una gran preocupación nacional e internacional porque se sospecha que el régimen Ortega esconde las cifras de la verdadera dimensión de la epidemia en su país. En Estados Unidos y México, dos de los países más golpeados por la pandemia, todavía no hay fecha de reapertura de eventos masivos como tampoco en Brasil, la nación más futbolera del mundo, pero también hoy el principal foco de la pandemia en el continente y segundo con más casos confirmados de Covid-19 en el planeta.

Salvo Costa Rica, que ya reanudó el campeonato días atrás, el resto de los ligas en América Latina no tiene todavía fecha para retomar los torneos profesionales. De hecho, pese a la crisis económica de los clubes, las presiones de las federaciones locales y la ansiedad de la afición por ver rodar el balón, es claro que mientras no pase el pico de la pandemia no se avanzará decididamente en esa dirección. Colombia está en este último grupo. Tanto el presidente Iván Duque como el Ministro del Deporte, si bien analizan los protocolos de reactivación presentados por la Dimayor, han sido claros en que por ahora es imposible fijar fechas para volver a las canchas, así sea con estadios vacíos.

Como se ve, para que el balón ruede de nuevo en América Latina habrá que esperar varias semanas más. No hay margen de acción sanitario en estos momentos para retomar eventos masivos. Así las cosas, el único consuelo será ver los partidos de Europa y otras latitudes, en espera del pitazo inicial en nuestro continente.