Ante la evidencia de que vivimos en un planeta con recursos finitos que deben ser conservados para futuras generaciones, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) viene impulsando la economía circular a nivel mundial, como un modelo económico y de comportamiento orientado a reaprovechar y alargar la vida útil de los bienes, evitando la utilización de materias primas vírgenes y la generación de residuos que impacten al medio ambiente.

De acuerdo con cifras de Superbid Colombia, multinacional brasilera pionera en el desarrollo de subastas online en Latinoamérica, durante el 2021 se obtuvieron $130 mil millones mediante la subasta de alrededor de 2.500 lotes de activos improductivos, un 78% más de las registradas en el 2020. “Mediante un software patentado que no requiere intervención humana, posibilitamos un canal de transacción donde empresas certificadas ponen sus activos en desuso a disposición de diversos compradores, permitiéndoles recuperar su valor al reincorporarlos nuevamente al mercado”, explicó Helena Balcázar, gerente general de Superbid Colombia.

En el marco de esta estrategia son múltiples los actores y aliados que han contribuido al fortalecimiento del desarrollo sostenible a través de la puesta en marcha de modelos de negocio alternativos comprometidos con el cumplimiento de las 9 R: reutilizar, reparar, restaurar, remanufacturar, reducir, reproponer, reciclar y recuperar.

• Le puede interesar:Alianza estratégica para expandir métodos de pago

Uno de ellos corresponde a las subastas en línea, un mecanismo que permite la recuperación de capital a través de la venta de bienes considerados inservibles, como vehículos usados, salvamentos, maquinaria industrial y residuos electrónicos.

De esta manera, cada una de las transacciones que se llevan a cabo en esta plataforma virtual favorecen la circularidad de los bienes, ya que se reconoce el potencial de aprovechamiento de ciertos materiales, otorgándoles un nuevo ciclo de vida y brindándoles la posibilidad de ingresar nuevamente al sector productivo y de consumo, lo que finalmente se traduce en la transformación de un modelo de economía lineal, donde se usa y se desecha, a un modelo circular ,donde se optimizan los recursos y se genera sostenibilidad.