Petróleo y gas generarían ingresos de $105 billones | El Nuevo Siglo
Francisco José Lloreda: La autosuficiencia energética es de vital importancia, sin ella los colombianos pagarían electricidad, gas y gasolina mucho más costosos.
Foto: Archivo ENS
Martes, 10 de Mayo de 2022
Redacción Economía

A pocas semanas de las elecciones presidenciales, la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP) presentó el informe económico “Escenarios de política energética y su impacto para los colombianos”, sobre los aportes que el sector podría hacer al país en el próximo cuatrienio, e incluso en esta década.

De acuerdo con el documento, Colombia tiene dos escenarios respecto al sector, uno de sostenimiento y uno de debilitamiento de la exploración y producción de petróleo y gas.

De acuerdo con la ACP, en un contexto económico global, que será retador para los distintos países por las presiones inflacionarias y la escasez de recursos energéticos y de abastecimiento en el mundo, el próximo presidente de Colombia requerirá de recursos económicos para ejecutar su programa de gobierno, que en todas las propuestas de los candidatos implica un aumento de gasto. Para financiarlo, la Nación requerirá de un aumento en sus ingresos, bien sea por la vía impositiva o por la dinamización de la economía a través de sectores capaces de generar recursos fiscales en gran proporción.

Escenario de sostenimiento

En este escenario, en la industria del petróleo y gas se estima que el sector generaría ingresos a la Nación por $105 billones en los próximos cuatro años y $227 billones hasta 2032, contribuyendo a la financiación de programas de desarrollo social, reactivación económica, diversificación productiva y energética y al equilibrio fiscal del país.

Asimismo, aportaría $38 billones por regalías durante el próximo Gobierno, y $80 billones hasta 2032, que con una coordinación de políticas públicas óptimas, contribuirían a mejorar la calidad de vida de las regiones del país, especialmente aquellas con mayores necesidades básicas insatisfechas (beneficiadas con regalías) y las productoras.

En este sentido, Francisco José Lloreda Mera, presidente de la ACP, le dijo a EL NUEVO SIGLO que la importancia del sector en Colombia se debe a que “proporciona energía para el desarrollo y crecimiento del país, así como recursos de inversión para la Nación y las regiones. En el próximo cuatrienio, si se suman los impuestos, regalías, inversión ambiental, dividendos de Ecopetrol, inversión en el propio sector, y la compra de bienes y servicios, le aportará a la economía más de 300 billones de pesos. Además de autosuficiencia energética, sin la cual los colombianos pagarían una electricidad, un gas y una gasolina mucho más costosos, en ese caso el Gobierno tendría que compensar con más impuestos o resignarse a una mejor inversión social”.

Por otro lado, en este primer escenario, específicamente en la industria, el impacto positivo también se refleja en las dinámicas económicas y sociales de las regiones, puesto que permitiría una contratación de bienes y servicios por $109 billones entre 2022-2026, mantener al menos 95 mil empleos e impulsar inversiones socioambientales en las regiones por al menos $1,7 billones en este mismo periodo.


Le puede interesar: No se giraron subsidios irregulares: Prosperidad Social


Escenario de debilitamiento

En contraste, en un escenario de debilitamiento, por desplome en producción, se estima una pérdida de $18 billones de aportes fiscales y regalías de las empresas de exploración y producción (E&P) a la Nación y las regiones. Por ejemplo, un departamento productor, como el Meta, dejaría de recibir $412 mil millones por regalías, recursos que equivalen a los ingresos destinados a fondos de salud y turismo del departamento; y uno no petrolero como el Chocó dejaría de recibir $70 mil millones, que hoy equivalen a la mitad de los ingresos del fondo local de salud del departamento.

De acuerdo con el informe, si se elige este escenario, la producción en cinco años caería 47% la de petróleo y 27% la de gas. Además, habría pérdida en divisas de aproximadamente US$68 mil millones entre 2022 y 2032 por reducción en las exportaciones de petróleo y, adicionalmente, importaciones anticipadas de petróleo y gas. Este choque externo, además de encarecer la energía, perjudicaría el bolsillo de los colombianos por un dólar más caro para todos los sectores y los hogares, pérdida de calificación de riesgo país, se encarecerían la deuda externa y las tasas de interés para los ciudadanos.

En este sentido, Lloreda afirmó que “este es un momento crucial para el país, luego de la pandemia y el recrudecimiento de la pobreza que esta ocasionó hay muchos desafíos en materia social, y este sector puede ser un gran aliado en la lucha contra la pobreza, pues los recursos que genere apoyarían la financiación de los principales programas de desarrollo del próximo gobierno, y permitirían apalancar la diversificación energética y productiva, mientras aprovechamos los recursos de petróleo y gas con los que cuenta Colombia en esta ventana de oportunidad única para el país”.

Indicó que "estos escenarios podrían ser el resultado de las decisiones de política energética que tome el próximo gobierno, para el caso de sostenimiento, que aproveche la oportunidad y fomente el desarrollo de la industria y, para el escenario de debilitamiento, que obstaculice el crecimiento del sector, de ahí que, como se evidencia, las decisiones que se tomen tendrán un impacto para todos los colombianos, especialmente para los de las regiones productoras de petróleo y gas, así como también para las menos favorecidas".

Adicionalmente, le dijo a este medio que el próximo gobierno tiene el reto de “garantizar la autosuficiencia del país en petróleo y gas, más allá de los próximos cuatro años, pues el país y el mundo van a seguir utilizándolos a la par de las fuentes renovables; para lo cual debe incrementar las reservas; y eso solo se logra impulsando la exploración y la producción en tierra firme y en costa afuera, en distintos tipos de yacimientos”.

Autosuficiencia energética

Dentro de los hallazgos más relevantes del informe, se resalta también la importancia que tiene para Colombia contar con petróleo y gas nacional (autosuficiencia energética), fundamental para mitigar el costo de los servicios públicos de luz, gas y combustibles (gasolina y diésel) y, por tanto, el costo de vida.

Al contrario, esta situación cambiaría si el país requiere importar desde 2026, teniendo en cuenta que, con importaciones de petróleo y gas, Colombia sería aún más vulnerable a tensiones internacionales, se encarecerían la energía, los insumos con los que se fabrican productos del diario vivir, insumos agrícolas, el dólar, tasas de interés, el endeudamiento público y privado, todo esto con repercusión para el costo de vida de los colombianos y la actividad de otros sectores productivos.

“Con este informe queremos presentar elementos que sirvan para el análisis y la toma de decisiones responsables a nuestros futuros gobernantes y ratificar que esta industria quiere ser aliada del próximo Gobierno en beneficio del país”, destacó el dirigente gremial.