Francisco Javier Viera, quien con 11 años de edad es fundador del Movimiento de Niños, Niñas y Jóvenes Guardianes por la vida, será el primer niño invitado a la franja El cine y yo de la Cinemateca de Bogotá.

Los colombianos podrán disfrutar de una conversación con el reconocido ambientalista, protector de la vida, que hace parte de las plataformas de Fridays for future de Greta Thunberg y Climate Citizen Lobby - Capítulo Colombia y es embajador de buena voluntad de la Unión Europea en este país.

“Quiero invitarlos a conectarse el viernes 16 de abril a las 7:00 p.m, en un espacio que se llama El Cine y Yo, para hablar de las películas que me han influenciado y que han influenciado mi forma de ver el mundo”, señala Francisco.

El Cine y Yo se realiza todos los meses, con personajes que se desempeñan en diferentes campos. En este esperado encuentro, liderado por el periodista Julio César Guzmán, los asistentes podrán conocer más sobre Francisco Javier y descubrir las películas favoritas que han marcado su infancia y su activismo.

Francisco Javier Vera, nació en Bogotá pero vive desde los dos años en Villeta, un municipio cundinamarqués a dos horas de la capital, donde sin duda, puede acceder más fácilmente a las bondades de la naturaleza que ama y protege con toda la energía de la que es capaz un niño de su edad.

Francisco, es considerado en la actualidad, como uno de los ambientalistas más reconocidos del país. Es recordado por la célebre intervención en el Senado de la República en el 2019, cuando pidió a los congresistas legislar en contra del fracking, que amenaza, para muchos, diversos ecosistemas del país que él está seguro, deben protegerse.

En la misma oportunidad Francisco expresó vivamente su rechazo a la ausencia de políticas que controlen el uso indiscriminado de plásticos de un solo uso y se manifestó fuertemente en contra de las pruebas de laboratorio con animales.

En febrero del presente año, Francisco Javier recibió la designación como embajador de buena voluntad de la Unión Europea en Colombia, por su compromiso y ejemplo en la defensa del medio ambiente. Este privilegio se otorga a personas con liderazgo y reconocimiento público por su labor, con voluntad y determinación de utilizar su imagen, posicionamiento y redes sociales para promover la igualdad de género o los derechos humanos y ambientales.