Lo que dejaron las urnas | El Nuevo Siglo
Domingo, 13 de Marzo de 2022

* Arranca en firme campaña presidencial

* Viene una segunda fase de coaliciones

 

Se cumplió este domingo una nueva jornada electoral que consolida la democracia colombiana. Pese a algunas dificultades, y los saboteadores subversivos que no dejaron de recurrir a la barbarie tradicional, el evento se llevó a cabo dentro de los cánones institucionales, lo que permitió un triunfo rotundo del sistema democrático. Esto tiene, por supuesto, de resultado general una reacción pacífica contra todas las formas de violencia.

En ese sentido, una vez más los colombianos han dejado en claro que el método adecuado para resolver los problemas y dar curso a las convicciones está en las urnas. Aunque en no pocos lugares del país el clima resultó adverso, como lo había pronosticado el Ideam, vale señalar el fervor y la responsabilidad con que los ciudadanos cumplieron con el derecho y el deber inaplazable de elegir a sus delegados en Senado y Cámara de Representantes. No obstante, el caudal de votación general para las corporaciones públicas bajó, ya que bordeaba el 55% anoche frente al 51 de hace cuatro años. Lo cual quiere decir que aumentó la abstención, mostrando que hubo confusión en el electorado a partir de introducir las consultas interpartidistas en la jornada parlamentaria.

Precisamente estas consultas fueron el foco de atención para elegir a los candidatos únicos de cada coalición para la Presidencia de la República. En esa dirección, puede decirse que desde hoy arranca la verdadera campaña por la Casa de Nariño.

Bajo esa perspectiva, varias encuestas acertaron en esta ocasión. Es claro el avance de la izquierda, en cabeza de Gustavo Petro y el Pacto Histórico, lo cual estaba de alguna manera presupuestado, logrando un rubro superior a los 5,8 millones de sufragios y cerca de un 48% de la votación general por las consultas. Del mismo modo es evidente, también, que los sectores de la centroderecha pudieron aglutinar una gigantesca cantidad de voluntad política al conseguir una votación extraordinaria de la coalición Equipo por Colombia, que sumó más de 4,1 millones de votos, es decir, el 34% del registro general. En este caso, Federico Gutiérrez ganó la candidatura única, muy por encima de los rubros que señalaban las encuestas, con segundo lugar de Alejandro Char y tercero de David Barguil. Bastante más atrás quedó la coalición de Centro Esperanza, que alcanzó 2,2 millones de apoyos (18%), un resultado menor al pronosticado. En esta consulta se impuso Fajardo, pero no en las proporciones que se pensaban. Las sorpresas se dieron por el lado de la buena votación que obtuvo el exgobernador boyacense Carlos Amaya y la baja del exministro Alejandro Gaviria.

Ya con estos tres candidatos designados es claro que se enrumban a la primera vuelta soportados en un número muy importante de apoyos, lo que cambiará ipso facto la competencia electoral.

De hecho, es muy probable que más bien se produzcan de inmediato coaliciones nuevas, con sectores partidistas que no participaron oficialmente de las consultas en el día de ayer. Por eso, en esta semana se comenzarán a dar acercamientos cruciales que incrementen la potencia electoral por cada candidato hacia la primera vuelta. De allí que los sectores de izquierda, por ejemplo, hablen de un Frente Amplio, al estilo de la dinámica uruguaya, o se concentren en ganar más adeptos del llamado centro político, en vez de esperar a hacerlo hacia la segunda vuelta, especialmente con el partido Liberal. La incógnita determinante es si esta colectividad entrará a reforzar la candidatura de Petro.

Por su lado, los sectores de centroderecha podrían aumentar decididamente su exposición electoral adicionando al Centro Democrático. Es un hecho que esta coalición no solo sacó una votación superlativa este domingo, sino que sumando las curules conseguidas en Senado y Cámara trasciende el resultado parlamentario de los sectores uribistas.

Fuere cual sea la reflexión que se haga en las diferentes colectividades, el punto central es que ahora viene una segunda fase de coaliciones, puesto que es una realidad insoslayable que nadie tiene asegurado un cupo en primera vuelta si no concita fuerzas adicionales.

En la composición del Congreso las cifras se presentaron a otro precio. Los triunfadores de las elecciones para Senado fueron el partido Conservador y el Pacto Histórico, con 16 curules cada uno. De otro lado, en la Cámara de Representantes los más votados fueron el liberalismo, el propio Pacto y el conservatismo. Un mapa político cuyo verdadero alcance solo se sabrá una vez se defina la contienda presidencial, en mayo y junio próximos.