El saldo de la deuda externa de Colombia alcanzó los US$154.968 millones, es decir el 55,4% del Producto Interno Bruto (PIB), con un incremento de US$16.285 millones (11,7%) respecto al mismo periodo del año anterior.
De acuerdo con el reporte del Banco de la República, el 86% de este saldo corresponde a créditos con vencimiento original mayor a un año y el 14% a créditos con vencimiento igual o menor a un año.
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Por tipo de instrumento, el saldo de la deuda externa corresponde principalmente a préstamos y a títulos de deuda. El aumento del saldo durante el año (US$16.285 millones) se explica por la mayor deuda de largo plazo (US$17.017 millones, 14,7%), que fue contrarrestada por la disminución en las obligaciones de corto plazo (US$732 millones, 3,2%).
Por sectores, el saldo de la deuda externa pública representa el 58% del total y la del sector privado el 42%. El 15% de la deuda externa total corresponde a préstamos entre empresas con relación de inversión directa.
Señala el informe que el saldo de la deuda externa del sector público alcanzó un monto de US$89.699 millones, mayor en US$15.864 millones (21,5%) respecto a diciembre de 2019. Dicho saldo equivale al 32% del PIB.
El aumento del saldo fue explicado por la mayor deuda de largo plazo, US$16.040 millones (22%) y por la reducción de la deuda de corto plazo, US$176 millones (20,4%).
Del saldo de la deuda contratada a largo plazo, el 72% está en cabeza del gobierno central, seguido por las entidades descentralizadas nacionales que responden por el 20% y el restante 8% corresponde a obligaciones de otros deudores.
Rubros
Por prestamistas, el 53% de esta deuda corresponde a títulos de deuda emitidos en los mercados internacionales, el 36% a deuda contratada con la banca multilateral y el restante 11% pertenece a entidades bilaterales, y a otras instituciones financieras.
De otra parte, el saldo de la deuda externa del sector privado fue de US$65.269 millones (23,3% del PIB). De este monto, el 79% correspondió a obligaciones del sector no bancario y el restante 21% a deudas adquiridas por instituciones del sector bancario.
Con relación al saldo de la deuda del sector no bancario, los préstamos con entidades del exterior representaron el 78,2%, los créditos de leasing financiero el 10%, las obligaciones por concepto de crédito de proveedor el 7,4%, el 4,4% restante corresponde a bonos y pasivos de seguros.
Bancos
En cuanto al sector bancario, a diciembre de 2020, las obligaciones por concepto de préstamos representaron el 47% de la deuda externa, el 49,3% correspondió a bonos adquiridos por inversionistas extranjeros y el restante 3,7% a depósitos de no residentes.
El saldo de deuda externa del sector privado aumentó US$421 millones (1%) respecto a un año atrás. El sector privado no bancario incrementó sus obligaciones externas en US$3.156 millones (6,5%) frente a lo registrado en diciembre de 2019. Este aumento lo explica, principalmente, los ingresos netos por concepto de préstamos tanto de largo como de corto plazo, compensado parcialmente por el vencimiento de bonos.
Por su parte, el saldo del sector privado bancario se redujo en US$ 2.735 millones (-16,6%) frente al observado a diciembre de 2019. Este resultado se explica principalmente por el pago de préstamos de corto plazo.
Los desembolsos recibidos en lo corrido del año 2020 fueron adquiridos en su orden por el sector de transporte y comunicaciones (19%), empresas manufactureras (18%), auxiliares financieros (16%), y por el sector minero (16%). El resto de actividades (en el que sobresale comercio) responden por cerca del 32%.