CAR: Ocho millones de toneladas de basura sacadas del río Bogotá | El Nuevo Siglo
LUIS FERNANDO Sanabria Martínez, director general de la CAR, explicó aspectos clave de la recuperación del río Bogotá.
/Cortesía CAR
Martes, 2 de Marzo de 2021
Redacción Bogotá

Una radiografía del avance de la recuperación del río Bogotá, una de las obras más importantes emprendidas por la CAR Cundinamarca, hizo el director de la Corporación, Luis Fernando Sanabria.

Dijo que ya se han retirado del mismo ocho millones de toneladas de basura, que la recuperación de la adecuación hidráulica del río tiene un avance del 90% y “si hablamos de propiciar vida, lo que llamamos oxígeno disuelto en el río, yo pienso que estaríamos en un 50%”.

Explicó que el proyecto global de descontaminación del río Bogotá está por los US$2.300 millones.

EL NUEVO SIGLO: La descontaminación del río Bogotá fue uno de los hitos de la última década para la capital y Cundinamarca. ¿Este es el proyecto insignia de la Comunidad Autónoma Regional?

LUIS FERNANDO SANABRIA: Sin lugar a dudas. Adicionalmente a un tema tan importante como lo es el saneamiento del río Bogotá, algo que la gente no siempre considera es el valor de las tierras que están colindando con esta corriente de agua y lo que su descontaminación les implicará. Que el río esté próximo a tener vida, implicará inversión y generación de empleo.

El hecho de que este sea el proyecto más grande que tenemos en la capital y que tengamos en torno al saneamiento del río plantas de tratamiento de aguas residuales que generan empleo como en Zipaquirá, Chía y Cota, hacen que sea muy significativo para el centro del país y de Cundinamarca.

ENS: ¿En qué punto está el proceso de recuperación del río Bogotá?

LFS: Esta pregunta tiene dos respuestas. Por una parte están las plantas de tratamiento,  y por otra está la recuperación hidráulica del río.

Hay una obra macro que implica el saneamiento del 25% del río Bogotá, que es la Ptar Salitre y esa planta de tratamiento tiene, al día de hoy, un avance del 94%. Y hay otra obra que es la Ptar Canoas, que representará el otro 75% del saneamiento del afluente, y dicha planta, que está siendo financiada por la Corporación y el Distrito de Bogotá, ya tiene los recursos.



Ahora, si hablamos de la recuperación de la adecuación hidráulica del río te diría que todo el proceso está en un 90% de avance del mismo. Y si hablamos de propiciar vida, lo que llamamos oxígeno disuelto en el río, yo pienso que estaríamos en un 50% del avance.

ENS: ¿Cuánta basura y sedimento se ha retirado del mismo?

LFS: En estos momentos la cifra global, desde que comenzó la descontaminación, es de más de 8 millones de toneladas de residuos, sedimentos y basura retirados del afluente.

ENS: ¿Pero la Ptar Canoas, de la que depende el 75% del saneamiento, no ha comenzado su construcción o sí?

LFS: Eso es totalmente cierto. La Ptar Canoas es un proyecto que hoy tiene un cierre financiero y ya tiene los recursos. El Acueducto, que fue a quien le correspondió ejecutarlo, está elaborando los pliegos, deberían salir aproximadamente en el mes de julio y su adjudicación esperamos que se dé finalizando este 2021.

La obra física está toda por hacer, pero ya se avanzó en la consecución de los recursos, que fue algo muy complejo pues fueron más de US$2.000 millones y adquirirlos correspondió a un esfuerzo financiero de ambas entidades enorme, la CAR, que aportó el 25% y el Acueducto, que aportó el 75%.

ENS: Usted me indicó que la obra del Ptar Salitre está en el 94% pero, ¿ya está funcionando?

LFS: No. No está funcionando. Está en periodo de prueba y yo creo que lo estará en el transcurso de este año porque es un periodo de prueba muy exigente que incluye la capacitación de las personas que entrarán a operarla. Adicionalmente, durante este periodo se ensayará y verificará la garantía de los equipos.

ENS: Pero aún durante las pruebas, ¿no está haciendo tratamiento de aguas en este momento la Ptar Salitre?

 LFS: Si. Mínimo pero sí. En la fase de pruebas de la planta El Salitre se está haciendo un pretratamiento de aguas residuales.

ENS: ¿Y cuánto calcula la CAR que entre a funcionar esta planta de tratamiento?

LFS: Yo espero que en marzo del siguiente año.

Costos

ENS: ¿En este momento hay una cifra estimada global de todo lo que se ha invertido en la recuperación del río?

LFS: Sí. Con la suma de la obra de la planta de tratamiento Ptar Salitre y la adecuación hidráulica del río podríamos estar hablando de unos US$300 millones. Ambas van de la mano, tienen el mismo fin y el mismo objeto. Esto en un periodo de tiempo del 2015 a la fecha. Y si a eso le sumas los costos que se han invertido en el proyecto de la Ptar Canoas, el proyecto global de descontaminación del río Bogotá está por los US$2.300 millones.



Efectos pandemia

ENS: Durante el 2020, ¿Qué tanto se retrasó la descontaminación del río Bogotá por los cierres derivados de la pandemia?

LFS: Yo siento que unos seis meses que fueron consecuencia del aislamiento y de tener que minimizar el número de trabajadores en la planta de saneamiento Salitre. Allí teníamos aproximadamente a 2.350 personas, y a raíz de la pandemia nos quedamos con 700 funcionarios.

Eso te puede dar una idea del traumatismo que hubo en el margen de rendimiento, y a eso debes añadir que los equipos que se emplean para la descontaminación del río obedecen a importaciones (y estas se suspendieron). Aún así hemos aprendido a vivir con la pandemia y de alguna manera nos hemos supeditado al aislamiento, a los controles y pese a todos nunca paramos.

ENS: ¿En cuánto tiempo creen que puedan volver al ritmo de trabajo pre pandemia?

LFS: Nosotros esperamos volver al ritmo que teníamos a comienzos del año pasado en el mes de agosto aproximadamente.

ENS: ¿Uno podría decir que en pandemia el río se descontaminó más o menos que en un año normal?

LFS: Durante la pandemia muchos nos quedamos en casa. Lo que más contamina es el aceite de cocina, las colillas de cigarrillo, los preservativos que se arrojan a las cisternas, y todo este tipo de elementos continuaron contaminando el río, pues la mayoría de los habitantes se quedó en la ciudad de Bogotá. Lo que sí le ayudó fue la suspensión de actividades que se hacen en las inmediaciones del mismo. Pararon y la contaminación fue mínima.