Consultar a terceros, búsquedas en línea y confianza en las plataformas de comercio electrónico, son algunos de los comportamientos al momento de la compra

En temas del amor, los patrones de consumo no son los mismos a la hora de tomar una decisión de compra, ya que son diversos los factores que entran a jugar dentro del proceso. Dentro de esas operaciones, quizás una de las más complejas es la de escoger un anillo de compromiso.

Wavemaker, agencia de planificación estratégica de medios, realizó un estudio en el que encontró algunas de las características y tendencias que se reflejan en esta importante decisión:

La decisión de compra

La mayoría de las veces, el anillo se entrega después de un período considerable de reflexión. Esta es, por supuesto, una de las compras más importantes que las personas hacen en sus vidas, por lo que el viaje del consumidor en ese proceso es diferente que el resto.

Para empezar, la fase de consideración es mucho más larga que la típica que se presenta con la mayoría de otros productos. Tomar la decisión sobre qué anillo comprar lleva en promedio unos 23 días, lo cual es casi ocho veces mayor que los tres días dedicados a la decisión de compra de fragancias masculinas y femeninas, según resultados de la investigación de Wavemaker.

Probablemente, esto se deba a que se requiere una gran cantidad de conocimiento específico al comprar un anillo de compromiso y, generalmente, este proceso no lo hace la gente por si sola. Se consulta con otras personas, aunque de forma discreta, así como a expertos en joyería y a algún amigo o familiar cercano, antes de realizar la compra.

El comercio electrónico, un jugador protagónico

En ese afán de buscar opiniones de terceros que faciliten la toma decisión, actualmente se viene posicionando algo que podría ser denominado el comercio electrónico social, un espacio de conversaciones y asesoría en vivo en sitios web y aplicaciones que están configuradas para cambiar radicalmente la forma en que hacemos compras.

Las nuevas empresas tecnológicas emergentes, como Gamitee, le permiten invitar a otras personas a su sesión web / aplicación a través de WhatsApp y Messenger para que pueda discutir la compra en tiempo real. Es esencialmente como ir de compras con sus amigos, familiares, pero lo hacen en línea juntos en lugar de hacerlo en una tienda física, de ahí la etiqueta de comercio electrónico social.

 “La oportunidad tanto para las marcas como para los pequeños y medianos comerciantes es inmensa. Iniciativas como estos canales de asesoría online, han puesto en evidencia que las tasas de conversión aumentan hasta diez veces debido a que los compradores interactúan cada vez en estos canales. El comercio electrónico social también tendrá un gran impacto en la decisión de compra del cliente: ese proceso de 23 días para comprar un anillo de compromiso podría acortarse drásticamente, lo que es significativo para los joyeros y minoristas que ya usan los medios digitales, pues que les entrega una ventaja competitiva”, señala Camilo Salah, Managing Partner de Wavemaker Colombia.

Esto puede ser una gran alternativa a tener en cuenta en las fechas coyunturales, como Amor y amistad, pues allí se apalancan las ventas de una manera diferenciadora en comparación con el resto del año. "Aunque febrero es el mes de más bajo consumo en algunos de los comercios electrónicos a donde dirigimos tráfico web, las campañas relacionadas en el marco de fechas importantes como San Valentín y Amor y amistad en 2019 aportaron entre el 15% y 25% de los ingresos promocionales para algunos de nuestro clientes", concluye Salah.