Contrariamente a lo que se esperaba, los niveles de contaminación subieron en el Día sin Carro. Con base en los datos oficiales que sobre contaminación en la capital del país maneja la Red de Monitoreo de Calidad de Aire de Bogotá (Rmcab) de la Secretaría Distrital de Ambiente (SDA), Jaime Fajardo, docente del programa de Ingeniería Ambiental de la Universidad Central, estableció que los niveles se elevaron al doble el jueves pasado.

“Hay dos partículas contaminantes que se miden, PM10 y PM2.5. Durante la jornada, el PM 2.5 superó el doble del límite diario permitido a las 8:00 a.m. Por ejemplo, en la estación de monitoreo del aire de Carvajal, en la localidad de Puente Aranda, se registró una cifra de 72,9 ug/m3 de material particulado, cuando el límite es de 37,5 ug/m3”, afirma Fajardo.

Y añade: “Para la partícula PM10, la estación de Kennedy registró un aumento del 40%, una cifra alarmante. Infortunadamente no tenemos las cifras de Carvajal porque la estación no hizo la medición de las horas críticas; por lo tanto, no hay un comparativo”.

Alto riesgo

¿Y la contaminación antes del ‘Día sin carro y sin moto’? En un análisis hecho el 6 de febrero, un día antes de la jornada, Fajardo también confirmó el incumplimiento de los límites permisibles para las partículas PM10 y PM2.5, en un periodo de exposición de 24 horas y en la medición anual, hecho que representa un riesgo en el entorno social y natural de las localidades de Puente Aranda y Kennedy, como las más afectadas.

En cuanto al comportamiento horario, los niveles de contaminación superaron de forma alarmante los límites máximos permisibles (75 ug/m3) con magnitudes cercanas a los 300 ug/m3, entre las 6 a.m. y 8 a.m., en la estación de Carvajal.

“Esto representaría de forma puntual una alerta o ‘Iboca naranja’, según el Índice Bogotano de Calidad del Aire, aumentando el riesgo de afectaciones de salud en la población expuesta, como la que se moviliza a través de los corredores viales en la franja horaria más transitada de la ciudad”, expresa Fajardo.

Además, el experto indicó: “Infortunadamente, las localidades de Bosa y Usme no cuentan con estaciones de medición; situación que nos preocupa, porque no nos permite conocer la realidad de la contaminación atmosférica en estos sectores”.

El ingeniero Fajardo hizo este análisis teniendo en cuenta las siguientes variables: 

-Medición del periodo 2018-2019 para identificar el comportamiento mes a mes de todas las estaciones. El registro se hizo desde enero del año pasado, hasta este miércoles 6 de febrero.

-El comparativo entre enero de 2018 y enero de 2019, con la finalidad de identificar cambios o tendencias entre las estaciones de monitoreo.

-La medición diaria de enero de 2019, para analizar los resultados de cada día del primer mes del año e identificar el cumplimiento normativo y qué tanto se excedieron los límites permisibles.

-Medición de horario. Se constató que entre el 30 y 31 de enero de 2019 se presentaron los niveles más altos de contaminación a la fecha en Bogotá; por tal motivo, se realizó el análisis horario para verificar cómo se comportaron los niveles de inmisión de cada contaminante.

-Medición durante la jornada del Día sin Carro y sin Moto.

El profesor recomendó el uso de tapabocas en la hora pico de movilización, especialmente a los ciclistas, entre las 6 a.m. y 8 a.m., y hacer deporte en las localidades mencionadas en horas de la noche, cuando disminuye la carga de partículas contaminantes.