FMI pide diversificar exportaciones para bajar dependencia del crudo | El Nuevo Siglo
Foto: Archivo
Martes, 14 de Febrero de 2023
Redacción Web

En su último informe sobre la situación de la economía colombiana, la misión para el país del Fondo Monetario Internacional dijo que uno de los aspectos principales que se debe tener en cuenta para avanzar en la transformación energética es diversificar las exportaciones para disminuir la dependencia del petróleo.

Ceyda Oner, jefa de misión para Colombia del FMI, dijo que “el objetivo de reducir la dependencia de Colombia del petróleo y del carbón es encomiable” pero para conseguirlo a mediano plazo se precisa "un plan de transición energética y de diversificación de las exportaciones bien diseñado".

Una transición "exitosa y duradera" hacia una economía más equitativa y verde requiere "avanzar con prudencia" en las reformas estructurales.

Asimismo, los expertos del organismo no descartan que las tasas vuelvan a subir en Colombia para frenar la inflación, que alcanzó 13,3 % interanual en enero.

"Las políticas macroeconómicas se están endureciendo adecuadamente", afirman los expertos en la evaluación periódica que realizan a sus países miembros, conocida como Artículo IV.

El Banco de la República ha reiterado su compromiso de alcanzar la inflación objetivo de 3 % a finales del 2024 y elevó continuamente las tasas de 1,75 % en septiembre del 2021 al 12,75 % en enero del 2023.

"Aumentos adicionales en la tasa de política monetaria podrían ser necesarios dependiendo de la evolución de la inflación, las expectativas de inflación, las condiciones de la demanda, entre otros factores", predicen los expertos del FMI.

Política monetaria

"De acuerdo con la información disponible, será necesario mantener una política monetaria restrictiva después del 2023", añaden.

La experta de la entidad señala que "se estima que la economía colombiana creció 8 % el año pasado y que está operando actualmente por encima del producto potencial" debido en gran medida al consumo privado, el dinámico crédito bancario y la recuperación de los niveles de empleo.

Los indicadores más recientes "muestran signos incipientes de que la economía empieza a enfriarse, con la demanda interna empezando a moderarse", algo "necesario", apunta el Fondo.

Sostienen los expertos que “el balance de riesgos en torno a las perspectivas económicas sigue inclinado a la baja, moderado sin embargo por un panorama mundial menos sombrío. Por ello, las políticas macroeconómicas deben seguir en una postura contractiva, priorizando el propósito de reducir de forma duradera la inflación y los desequilibrios externos”.



El FMI sí recomienda al Gobierno “avanzar con prudencia con reformas estructurales claves, junto con una continua estrategia robusta de comunicación, que será esencial para impulsar la productividad, mejorar la inclusión y garantizar una transición gradual y bien secuenciada hacia una economía más verde y diversificada”.

Respecto al crecimiento, el FMI señala que “beneficiándose de políticas que respondieron efectivamente a la pandemia y de los muy favorables términos de intercambio, se estima que la economía colombiana creció 8,0 % el año pasado y que está operando actualmente por encima del producto potencial. El fuerte crecimiento del producto se vio impulsado en gran medida por el consumo privado –reflejo de una demanda represada por la pandemia–, el dinámico crédito bancario y la recuperación de los niveles de empleo, aunque el desempleo entre las mujeres y los jóvenes sigue siendo elevado”.

Precios

Puntualiza Ceyda Oner que “en un contexto de demanda interna robusta, de elevados precios de las materias primas y de choques relacionados con el cambio climático, la inflación alcanzó 13,3 % interanual en enero del 2023, y la inflación básica (excluyendo alimentos y energía) aumentó 9,8 % en el mismo periodo. Pese a los términos de intercambio favorables y un sólido crecimiento en las exportaciones no tradicionales, se estima que el déficit en cuenta corriente aumentó del 5,6 % del PIB en el 2021 al 6,3 % del PIB en el 2022”.

Prevé el organismo que “el crecimiento del producto tenga una desaceleración marcada en el 2023 por cuenta del endurecimiento de las políticas macroeconómicas, de la desaceleración de la economía mundial y de los mayores costos de endeudamiento en el mundo. A su vez, este necesario enfriamiento de la economía llevaría gradualmente la inflación hacia el objetivo del banco central a finales del 2024. Se espera también que los desequilibrios externos se reduzcan en el contexto de políticas más restrictivas, y se proyecta que el crecimiento del crédito se siga moderando”.

Asimismo, el FMI dice en su análisis de la economía colombiana, que “los riesgos externos adversos siguen siendo elevados, ya que las condiciones financieras mundiales podrían endurecerse más abruptamente de lo previsto, con repercusiones negativas sobre los precios de las materias primas, las salidas de capital y la demanda interna. No se pueden descartar riesgos internos, pero se recomienda la implementación de políticas muy sólidas, lo que incluye seguir cumpliendo con la regla fiscal y con el marco de inflación-objetivo, ayudaría a reforzar la resiliencia de Colombia y su capacidad de responder a choques externos e internos”.