Pensamiento mágico y pandemia | El Nuevo Siglo
Lunes, 8 de Febrero de 2021

Existe un concepto en el mundo de la psicología que también ha sido tratado por la antropología que es el pensamiento mágico que se relaciona con la percepción de la causa y el efecto de las situaciones. Este tipo de pensamiento nos ayuda a mitigar la ansiedad frente a algunos acontecimientos de la vida diaria. De alguna forma creemos en la magia, en lo irreal, en lo que no tiene sustento ni explicación desde la ciencia y se lo atribuimos como causa a situaciones difíciles por ejemplo, en este tiempo de pandemia nos imaginamos una cura para el coronavirus que de un momento a otro haga que desaparezca y no vuelva nunca más.

Me ha llamado la atención en muchos aspectos este tipo de ocurrencias que escucho en el día a día, porque si bien ayudan a disminuir la ansiedad frente a la situación difícil que estamos viviendo también generan muchos problemas y de paso profundizan conflictos con los mensajes erróneos que se nos han dado como sociedad, como lo mencioné en mi artículo anterior. Por ejemplo el que tenemos que convivir con un virus, en lugar de convivir con las medidas estrictas de protección personal.

Hace menos de un año recuerdo, gratamente, como recién se reportó el primer caso de coronavirus en Colombia, durante las noches las personas salían a aplaudir a sus balcones o ventanas a unos “héroes” que seguramente los imaginaban vistiendo una armadura y con una jeringa gigante como armamento para luchar contra un enemigo invisible. No puedo ocultar que con emoción pensé que habíamos recobrado la cordura. Sin embargo, poco a poco esto fue cambiando con una alta dosis de realidad cuando comenzaron a incrementar los muertos por esta enfermedad y se comenzaron a evidenciar las debilidades y límites de nuestro sistema sanitario.

Una de las ocurrencias que más me han dolido como médico es que se piensa que los profesionales de la salud se están lucrando por rotular con diagnóstico de covid a pacientes que no lo tienen o como lo he escuchado de muchas personas que se han infectado que mencionan que no consultan a las clínicas y hospitales porque allá los matan. Ante esto debo decir que la dosis de realidad ante esto es compartirles que me siento orgulloso de ser médico, que felicito, acompaño y sufro junto a todos los profesionales de la salud que nos la hemos jugado con entereza, compasión, valentía y arrojo para cuidar, acompañar, contener, informar, llorar, enfrentar cada síntoma de esta enfermedad y cada persona que parte de manera dramática. Porque lo estamos haciendo con y desde el corazón, porque continuamos bajo las mismas condiciones económicas y de incertidumbre de siempre y muchos con meses de retraso en sus pagos. Es importante aclarar que nuestro sistema de salud vive con muchos problemas económicos y que lo justo era resolverlos para dar respuesta a esta crisis, algo muy diferente a que ganamos millonadas por poner diagnóstico de covid.

Qué paradoja, los profesionales de la salud pasamos de héroes a villanos y debo decirles que cada profesional de la salud, desde su ética, se forma para cuidar y proteger la vida, pero somos seres humanos como ustedes, por tanto, no estamos para quitarle la vida a nadie. Las personas se mueren por la gravedad de sus enfermedades y sus consecuencias en primera instancia, porque el acto médico debe verse desde la buena fe.

*Gerente de Hospices Presentes