General, secretario de Seguridad | El Nuevo Siglo
Martes, 7 de Febrero de 2023

Tremenda responsabilidad la que  contrae el General de la reserva activa, Óscar Gómez Heredia, por su doble  calidad de oficial en uso de buen retiro y General de la institución. Digo tremenda porque la capital sabe de su trayectoria como comandante que fue de Bogotá y otros departamentos que debió  tutelar, lo que induce  la ciudadanía a esperar profusos resultados de su labor en tan delicado cargo, donde muchos han pasado sin pena ni gloria, pese a su empeño, dedicación y entrega, pero sin la experiencia que da la continua brega de enfrentar  la delincuencia, el desorden y la apatía, temas recurrentes en estas ciudades y  desestimados tanto por las administraciones como la justica y el gobierno central;  circunstancias desconocidas para aquellos funcionarios que le antecedieron, pero  trilladas a profundidad por nuestro general designado como secretario de Seguridad en Bogotá.

Sabe mi general Gómez del cuantioso inventario delictivo de la capital, no es ajeno a las falencias que en materia de seguridad agobian la ciudad, como es el deficiente pie de hombres al servicio policial, el incompleto y limitado equipo puesto al auxilio del componente institucional, y el escaso respaldo tanto de la administración como la ciudadanía y justicia en los procedimientos.

Ese abandono agobia y desmoraliza nuestros hombres, estadio que se debe neutralizar lo antes posible si queremos contar con una fuerza al servicio del derecho, comprometida, enérgica y aceptada.  

Esta escuela que acompaña nuestro secretario le permitirá, de seguro, coordinar con el comandante del Departamento, estrategias, programas y proyectos que neutralizarán los mencionados desamparos, permitiéndole en representación de la señora alcaldesa, medir y valorar los resultados de la fuerza pública en su afán por llevar seguridad, tranquilidad y paz a todos los rincones del distrito capital, así como organizar un equipo de trabajo comprometiendo toda la administración,

No será tarea fácil, pero hay suma urgencia de aceptar que la seguridad es transversal y toca a todas las secretarias, que en determinado momento deben coordinar, con seguridad, para prevenir, atacar y desmontar situaciones de amenaza contra los habitantes y la organización distrital.

Pero no solo la prevención y reacción de cara a la delincuencia es suficiente, lograr el apoyo de todas las agencias de inteligencia, permitirá controlar las organizaciones delictivas de impensados pelambres. Seguros estamos que el novel secretario tiene precisión sobre aspectos de suma importancia que atender, como lo es la pronta y eficiente justicia, componente irremplazable en el concepto seguridad ciudadana.

¡Imposible aceptar que la capital no cuente con suficientes centros de reclusión para atender la inmensa demanda!

En fin, no lo abrumemos, pero veremos cercanía y orientación hacia los grupos sociales dispuestos a colaborar; veremos la motivación permanente del personal policial, sin olvidar la denuncia y cadena de custodia con los conducidos ante jueces de garantías.