Día Nacional de la Cumbia: cinco canciones emblemáticas | El Nuevo Siglo
Este ritmo y danza es uno de los más representativos de la región Caribe del país, cuyas melodías salen de instrumentos como gaitas, guaches, maracas y tambores.
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Jueves, 3 de Febrero de 2022
Redacción Cultura

Gaitas, guaches, maracas y tambores le dan vida a uno de los ritmos más representativos de la región Caribe de Colombia: la cumbia, que al sonar anima a bailarines, vestidos con amplias polleras de colores, velas y sombreros vueltiaos, a adornar sus melodías con pasos suaves y elegantes.

Un ritmo y danza, cuya historia y éxitos más escuchados vuelven a la memoria de los colombianos por esta fecha, a propósito de la celebración del Día Nacional de la Cumbia, la cual nació a partir de una fusión de culturas de indígenas, comunidades afrodescendientes e hispanos en el siglo XVII, en plena época de la colonia española.

Para conmemorar esta fecha EL NUEVO SIGLO consultó a Manolo Bellon, un reconocido escritor, locutor y crítico musical colombiano, y a Willy Vergara, locutor de Radio Nacional de Colombia, acerca de las cinco canciones más emblemáticas de la cumbia en el país.

1. “La pollera colorá”

Esta pieza, de la autoría musical de Juan Bautista Madera Castro, nació a principios de la década de los 90, cuando el maestro llega a Barrancabermeja para unirse a la Orquesta de Pedro Salcedo, donde tocaba el clarinete.

En medio del sonido de porros, merecumbés y fandangos, Madera Castro sintió que faltaba un ritmo que les hiciera homenaje a las polleras que se movían al ritmo de la música. Y es allí, en una noche en esta ciudad bumanguesa, que el maestro, originario de Sincé, Sucre, se ingenió la parte musical de “La pollera colorá”.

Luego de algunos días de fama en varios lugares de la región santandereana con esta cumbia, Wilson Choperena, quien era el cantante principal de la orquesta de Pedro Salcedo, decidió crear la letra de esta pieza que puso a bailar durante varias noches al público.

Así se creó ante los espectadores para esos días, y algunos años después para el mundo, una melodía que se ha escuchado hasta hoy, de generación en generación.

Actualmente, “La pollera colorá” se considera un himno colombiano y el nombre de su compositor musical, Juan Bautista Madera Castro, está presente como aquel maestro de la música colombiana que le dejó un legado al país con esta icónica pieza.

2. “Cumbia cienaguera”

Hace más de 70 años nació esta cumbia, creada por Andrés Paz Barros. Sin embargo, la historia de esta canción se remonta algunos años más atrás, ya que fue en 1937 que el compositor cienaguero escribió esta pieza con el título “La cama berrochona”, la cual la interpretaron varias orquestas.

Quince años después, en 1951, fue grabada esta misma canción, pero cambiándole su nombre a “Cumbia cienaguera”, con la letra de Esteban Montaño. Este proyecto musical contó en esa época con la participación del acordeonista Luis Enrique Martínez, el maestro José Barros con una introducción en su tambora y el coro femenino de la banda Las Pueblanas.

Su éxito le ha dado la vuelta al mundo, pues la han interpretado múltiples agrupaciones y orquestas, además de hacer algunas apariciones en producciones cinematográficas.



3. “Cumbia Sampuesana”

En una tarde, en la casa de la señora Ana Perfecta Galván, donde muchos arrieros llegaban a descansar, el maestro José Joaquín Bettín Martínez toma su acordeón y comienza a componer melodías, inspiradas por el titilar de las luciérnagas que llegaban al caer la noche en ese instante. Allí el compositor creó esta obra, una de las más importantes del folclore colombiano.

Esta pieza fue tan icónica para la cultura nacional, que fue protagonista de varios hitos como el anuncio del Premio Nobel de Literatura para Gabriel García Márquez, en el que Emiliano Zuleta decidió celebrarlo interpretando esta obra musical. Así mismo, grandes artistas han logrado conquistar importantes escenarios con la “Cumbia Sampuesana” como Israel Romero y Aniceto Molina, entre otros más.

Bettín Martínez, nacido el 22 de octubre de 1920 en Sampués, Sucre, creció junto a sus hermanos Gregorio y Pedro, a quienes admiraba por su talento al tocar el clarinete. El compositor tenía esa misma vena musical, pero no seguiría los mismos pasos de sus hermanos, ya que lo que realmente movía su pasión era interpretar el redoblante, la caja y el acordeón.

Durante su juventud disfrutaba ver los shows musicales de los acordeonistas, donde conoció a Heriberto Villamil, con quien tocaba la tambora y aprendía a interpretar el acordeón bajo la supervisión también de Alfredo Gutiérrez y Poldo Salazar. Durante sus próximos años lograría componer “Cumbia Sampuesana”, la canción que le cambiaría su vida.

4. “Yo me llamo cumbia”

En 1969 nació esta cumbia de la mano de la poesía de Jesús Arturo García Peña, conocido como ‘Gareña’, quien murió en agosto del año pasado y quien también es recordado por piezas como “Te dejo la ciudad sin mí”, “Amor a Dios”, “Raza”, “La traga maluca” y “Dulce sultana”.

Desde la década de los 50 empezó a sonar por todas partes esta pieza del barranquillero, nacido en 1931, la cual fue interpretada también por grandes de la música como Totó La Momposina, La Sonora Dinamita y Puerto Candelaria, entre otras estrellas más del folclore nacional.

Según expertos, esta canción recoge la historia de la cumbia y le rinde un homenaje a la cultura que compone este tradicional ritmo; un estilo que caracterizaba su música, en el cual resaltaba una fusión entre melodías de comunidades indígenas, negras y europeas.

5. “Danza negra”

Pedro Laza fue quien compuso esta pieza en 1960, la cual se convirtió en otro himno cultural colombiano, no solo cuando el maestro José Barros grabó una nueva versión, sino también al presentar el sonido estéreo en la historia fonográfica del país.

Laza nació el 2 de diciembre de 1904 en Cartagena, luchó contra viento y marea, por supuesto, también con la negativa de su padre de dedicarse a la música, para tomar el camino de las artes del sonido.

Con un estilo estruendoso Pedro dejó a los amantes de la música clásicos como Del tingo al tango”, “Esperma y ron”, “Fandango”, “El pescador”, “Fiesta y corraleja”, “Mapalé”, “Porro”, “Percusión colombiana”, “Rito esclavo”, “Así me gustan los pollos”, “Pan caliente”, “La machaca” y “Cartagena alegre”, entre otros.

Un plus

Los locutores también destacanm entre la lista de estos temas icónicos de la cumbia, obras como “Danza negra” de Lucho Bermúdez, “Cumbia del Caribe” de Edmundo Arias y “Cumbia en dominante” de Efraín Herrera.