Luego de  una revisión detallada de aspirantes para reemplazar como gerente del Metro de Bogotá a Andrés Escobar, quedó lista la terna para que la Alcaldía tome la decisión en las próximas semanas.

Entre los candidatos a la gerencia están tal vez las personas con más experiencias en el sector de infraestructura, de transporte y de vías.

Se trata de José Leónidas Narváez Morales, María del Pilar Rodríguez Caicedo y Luis Eduardo Gutiérrez Díaz. Narváez Morales se desempeña como vicepresidente de Gestión Contractual de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), fue director general del Invías  (2012-2014) y Secretario de Obras Públicas de Cundinamarca (2000-2002), entre otros cargos públicos.

Por su parte, María del Pilar Rodríguez Caicedo, actualmente se desempeña como gerente Administrativa y Financiera de Centra Ingeniería y Construcción S.A.S.; también fue gerente general de Ferrocarril del Pacífico S.A.S. (2014-2016) y presidenta de Metrocali S.A. (2012-2013).

A su vez, Luís Eduardo Gutiérrez Díaz, según su hoja de vida, es director de proyectos en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y ha estado relacionado con el sector de Minas y Energía, en algunas instituciones como Ingeominas.

No se conoce con claridad cuándo se va a definir cuál de los tres aspirantes van a ocupar el cargo que dejará Andrés Escobar, quien venía gerenciando la empresa desde la administración del exalcalde Enrique Peñalosa. 

Trabajo

Sin embargo, al llegar Claudia López a la alcaldía,  acordó con Escobar que trabajarían juntos por un año y al terminarse el primer año de mandato de la Alcaldesa se conoció sobre la renuncia de Escobar a mediados del mes de diciembre,  tras quedar establecidas las primeras dos líneas del metro.

Quien llegue a dirigir el proyecto deberá asumir el inicio de las construcciones de la primera línea que se espera arranquen este año y consolidar algunas acciones de cara a la segunda línea que cruzará la ciudad hacia el noroccidente.

Al presentar su carta de renuncia en diciembre, Escobar Uribe explicó que ya se había cerrado un ciclo, “con lo cual se han dado las condiciones para que se produzca un relevo en la dirección de la empresa”. Destacó el ingeniero, entre los logros bajo su gerencia, la firma del acta de inicio de las obras de la primera línea y el estudio de prefactibilidad para la línea 2, que llevará el Metro hasta las localidades de Engativá y Suba.

“Es la oportunidad para agradecer a quienes hicieron posible estos logros: al expresidente Santos y su equipo de gobierno, que aseguró la financiación del 70%; al exalcalde Enrique Peñalosa, quien inspiró, lideró y permitió asegurar la primera línea con su contratación; al presidente Iván Duque, quien apoyó la continuidad y respaldó los procesos internacionales; también a Luis Alberto Moreno, quien, como presidente del BID, lideró la cofinanciación de largo plazo y vigiló las licitaciones internacionales”.

Agradeció también el ingeniero a la alcaldesa Claudia López, por haberlo ratificado en el cargo “después de estudiar a fondo todas nuestras actuaciones en los más importantes procesos de contratación” y el permanente apoyo de los miembros de la Junta Directiva.

Proceso

En su momento, la alcaldesa Mayor, por su parte, agradeció a Escobar haber permanecido al frente de la EMB durante el primer año de su administración y reiteró que, de común acuerdo con el Gobierno nacional, comenzará un proceso de renovación de la empresa. “Toda mi gratitud y reconocimiento a Andrés Escobar por su labor para sacar adelante la primera línea del Metro de Bogotá”, manifestó la mandataria.

Precisamente este viernes, la Secretaría Distrital de Ambiente le otorgó a EnelCodensa la Licencia Ambiental que le permitirá adelantar el traslado de la infraestructura actual de la subestación eléctrica Calle Primera, cuyo objetivo es asegurar las distancias de seguridad requeridas para la construcción de la Primera Línea del Metro de Bogotá.

Este proyecto consiste en el desmantelamiento de la infraestructura actual y el diseño, construcción y puesta en funcionamiento de una nueva subestación, con una capacidad de 80 millones de voltamperios (MVA), así como de sus líneas de transmisión, para garantizar el servicio de energía para más de 206.000 habitantes del centro de Bogotá.