El Partido Laborista, de la oposición británica, pidió al Parlamento, el lunes por la noche, que realice una votación sobre si se debería celebrar o no un segundo referendo del brexit.

La enmienda representa un cambio significativo en la política del partido con respecto a un segundo referendo y también tiene como objetivo descartar un brexit sin acuerdo y otorgar al Parlamento el poder de considerar planes alternativos propuestos por los parlamentarios sobre el acuerdo de retirada de la primera ministra de Reino Unido, Theresa May.

La propuesta incluye “un acuerdo de brexit alternativo que proteja los empleos, los niveles de vida y los derechos de los trabajadores y estándares medioambientales a través de una unión aduanera integral con un contrato del Reino Unido y un acuerdo sólido en el mercado único”.

Además, “la opción de una votación pública sobre un acuerdo o propuesta sobre la futura relación del Reino Unido con la Unión Europea” debería ser considerada por el Parlamento para romper el impase del brexit, agregó el partido.

La enmienda destacó la política de los laboristas de un “brexit de Trabajos Primero”, que prioriza los derechos de los trabajadores, las normas comerciales y las protecciones ambientales que están en línea con la UE. También respalda la política de conferencia laborista de “mantener todas las opciones sobre la mesa”, incluida una votación pública.

Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista, declaró: “Theresa May ha demostrado hoy que no tiene un Plan B después del rechazo completo de su acuerdo del brexit mal hecho ante los parlamentarios la semana pasada. La primera ministra se rehúsa a cambiar sus líneas rojas o a poner en la mesa la amenaza de una salida sin acuerdo. Los diputados deben actuar para romper el estancamiento”.

“Nuestra enmienda les permitirá a los parlamentarios votar sobre las opciones para poner fin al estancamiento del brexit y prevenir el caos de un no acuerdo. Es tiempo para que el plan alternativo de los laboristas adquiera protagonismo y al tiempo mantener todas las opciones sobre la mesa, incluyendo la opción de una votación pública”, agregó Corbyn.

La enmienda propuesta destaca el intento de los líderes de cerrar las divisiones entre altos funcionarios que se encuentran en desacuerdo como Corbyn, quien se muestra escéptico sobre un segundo referendo y el secretario del brexit, Keir Starmer, quien está abierto a la idea del voto popular.

La semana pasada, 71 parlamentarios laboristas y 13 diputados del Parlamento Europeo declararon su apoyo a un segundo referendo ejerciendo presión sobre Corbyn y los líderes para apoyar esta iniciativa. Corbyn, sin embargo, ha dejado claro que la celebración de una elección general es su máxima prioridad.

El Partido Laborista ahora está trabajando en un acuerdo alternativo del brexit que contaría con el apoyo de todos los partidos en el Parlamento, después de perder el voto de no confianza en su intento por destituir a May el miércoles de la semana pasada.