Panamá dio por superado un diferendo limítrofe con Nicaragua por la pretensión de Managua de extender su plataforma continental a aguas bajo soberanía panameña, luego de que el presidente Ricardo Martinelli rechazara de manera "categórica" en la ONU esa aspiración.
"Panamá da por superado el diferendo con Nicaragua", aseguró en un comunicado la cancillería panameña tras un encuentro bilateral de los cancilleres al margen de la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.
Los cancilleres panameño Fernando Núñez Fábrega y nicaragüense Samuel Santos "llegaron a un acuerdo preliminar para que en caso de que hubiera un traslape no se comprometa la jurisdicción panameña", señala el texto.
El anuncio del acuerdo tuvo lugar horas después de que el presidente panameño Ricardo Martinelli manifestase en su discurso ante la Asamblea General de la ONU "la imperiosa necesidad de rechazar categóricamente el intento de delimitación de las fronteras marítimas de la República de Nicaragua".
Martinelli explicó que el documento enviado por Nicaragua ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la Convención sobre el Derecho del Mar de la ONU afecta un "área marítima aproximada de 49.892,54 kilómetros cuadrados de aguas panameñas".
"Mi gobierno quiere expresar su profunda y enérgica preocupación en el sentido de que las coordenadas trazadas en la solicitud nicaragüense generan una inobjetable superposición a nuestros espacios marítimos y a los tratados concertados por la República de Panamá con los países vecinos", señaló Martinelli.
En la nota de la cancillería panameña se consigna que expertos de las dos naciones "revisarán" la solicitud de Nicaragua ante la ONU de modo que ésta no afecte las aguas territoriales panameñas".
"Nuestra solicitud no afecta a Panamá. No vamos a afectar a terceros países. En caso de que haya un traslape, buscaremos una fórmula de entendimiento con Panamá, como hicimos con Jamaica", dijo el canciller nicargüense Santos, según al comunicado.
De su lado Núñez indicó que su país está dispuesto a compartir la superposición "siempre y cuando no afecte las aguas territoriales panameñas, ni la salida del Canal, que tiene un Tratado de Neutralidad suscrito por la comunidad internacional".
En noviembre de 2012, la CIJ resolvió un litigio limítrofe entre Nicaragua y Colombia, reconociéndole a Bogotá la soberanía sobre las islas de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, así como de los islotes y cayos adyacentes, pero otorgándole a Managua unos 75.000 km2 de mar en disputa.
Panamá teme que estos nuevos límites marítimos otorgados a Nicaragua terminen afectando la extensión de sus aguas territoriales en la costa del Caribe.
Las acusaciones de Martinelli tuvieron lugar luego de que la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, denunciase el martes en la apertura de la gran cita anual de la ONU el "irrespeto absoluto" de Nicaragua al fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre un diferendo limítrofe entre ambos países.
Caso del buque norcoreano
En su discurso, Martinelli se refirió también al caso del carguero norcoreano Chong Chon Gang detenido el pasado 10 de julio por la policía panameña cuando trataba de cruzar el canal de Panamá, e indicó en ese sentido que su país "cumplió con su deber como Estado miembro" de la ONU.
Los agentes panameños hallaron armamento cubano sin declarar escondido en contenedores bajo toneladas de sacos de azúcar, por lo que el gobierno panameño pidió asistencia a las Naciones Unidas para determinar si la carga violaba alguna resolución de la ONU contra el régimen de Pyongyang por sus ensayos nucleares.
Tras la visita de una misión de la ONU, y mientras el buque sigue amarrado con 35 tripulantes del carguero detenidos, el Consejo de Seguridad tiene en sus manos un informe sobre el cual aún no se ha pronunciado.
"Respetaremos el resultado de la investigación y dejamos claro que Panamá no tiene problema alguno con los Estados involucrados en este asunto", dijo Martinelli al respecto.
"Como presidente de un país soberano, no vengo a este foro a demandar acción alguna contra los países involucrados en este incidente. Simplemente, Panamá aspira y solicita el reconocimiento de que nuestra actuación se fundamentó en el deseo inequívoco de cumplir con lo que esta Organización estableció", concluyó.