El lateral izquierdo de la selección colombiana Pablo Armero fue presentado este viernes como nuevo refuerzo del Flamengo de Rio de Janeiro, tras un acuerdo con el Udinese italiano para su cesión hasta final de año.
"Quiero adaptarme al grupo, atender a las peticiones del profesor [Vanderlei Luxemburgo, ndlr]. El hincha que me sigue sabe lo que puedo dar en el campo. Cuando jugué con mi selección en la Copa del Mundo aquí en Brasil, gustaron mis actuaciones", afirmó el zaguero de 28 años a la web del Flamengo.
Armero, sin embargo, ya sabe lo que es jugar en la liga brasileña. El Palmeiras de Sao Paulo fue su primera parada en 2009 tras despuntar en el América de Cali. En las filas del 'Verdao' coincidió con Luxemburgo, su entrenador ahora en Flamengo.
Tras su temporada en el Palmeiras, Armero dio el salto a Europa de la mano del Udinese italiano. Después una muy buena primera campaña en el Calcio, donde llegó a figurar en el once ideal del campeonato 2010-2011, acabó siendo cedido al Nápoles en 2013.
Como ya le ocurrió en el Udinese, el lateral colombiano cuajó un buen debut con el club napolitano, que acabó ejerciendo la opción de compra por él al final del campeonato.
Pero en el mercado de invierno de 2014 volvió a ser cedido hasta el final de temporada al West Ham inglés, donde no tuvo una buena actuación.
Pese a ello, el seleccionador de Colombia, José Pekerman, confió en su experiencia para el Mundial Brasil-2014, donde los 'cafeteros' fueron una de las selecciones revelación.
Titular en los cinco partidos que disputó Colombia en el torneo, donde incluso marcó el primer gol de su selección en el debut ante Grecia, Armero volvió a ser contratado por el Udinese. Aunque, como ya le ocurrió en su primer paso por el club entre 2010 y 2012, el lateral fue cedido, esta vez al AC Milan en agosto.
El colombiano, conocido por sus bailes al celebrar los goles, no convenció al técnico Filippo Inzaghi y aterrizó este jueves en Brasil para unirse al club conocido por tener la mayor hinchada del país.