El Banco Central argentino rechazó el miércoles en una Corte de Apelaciones federal estadounidense que sus activos puedan ser objeto de embargo, como han vuelto a pedir los fondos especulativos que ganaron un juicio al país sudamericano por deuda impaga.
Un panel de tres jueces escuchó a las partes por una apelación presentada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) a una decisión del magistrado federal Thomas Griesa de considerar a la entidad como "alter ego" del gobierno y, por lo tanto, susceptible de embargos.
Griesa falló en 2012 a favor de los fondos especulativos NML Capital y Aurelius en un juicio por bonos en default de la deuda argentina. Luego de que la sentencia quedase firme a mediados de este año, el juez instó a Argentina a pagar 1.330 millones de dólares en capital e intereses atrasados.
La negativa del país a acatar el fallo lo ha llevado a un default parcial sobre su deuda reestructurada en 2005 y 2010, además de haber sido declarado en desacato.
En su búsqueda de activos argentinos para cobrar la sentencia, los fondos convencieron a Griesa de que el BCRA es un "alter ego" del gobierno y no es independiente, ya que el Ejecutivo lo controla, por lo que la entidad podría ser objeto de embargo.
El BCRA apeló la decisión de Griesa, y este miércoles su abogado Joseph Neuhaus rechazó los argumentos de los fondos, entre ellos los cambios de presidentes del banco durante la gestión de Cristina Kirchner al frente del país, o el uso de sus reservas internacionales para el pago de vencimientos de deuda.
De su lado, el letrado de NML Capital, Ted Olson, insistió en que la administración Kirchner "está controlando todas las actividades del banco central" y que "reemplaza a cualquier responsable que se niegue a hacer lo que Argentina quiere".
- "Insuficiente independencia" -
Presente en la audiencia, uno de los abogados de Argentina, Carmine Boccuzzi, señaló de su lado que el hecho de que haya "insuficiente independencia" del banco no significa que pueda ser considerado "alter ego" del gobierno.
En 2011, este mismo tribunal -integrado por los jueces José Cabranes, Richard Wesley y Peter Hall- había determinado que la inmunidad de los activos del BCRA no dependía de si la entidad era "independiente" del Estado, sino de si los activos eran usados para actividades inherentes de un banco central o fines comerciales.
Con esa argumentación, había rechazado un embargo de 100 millones de dólares de reservas del BCRA en las cuentas de la Reserva Federal estadounidense en el Bank of New York.
Este miércoles, Cabranes señaló que le "parecía que el actual gobierno de Argentina domina todo, incluyendo los bancos", aunque preguntó al abogado de los fondos la razón por la cual Griesa no había investigado más sobre el tema antes de pronunciarse.
Wesley, en tanto, manifestó sus dudas sobre el hecho de que Griesa había considerado al BCRA como "alter ego" para algunos propósitos y no para otros, cuestionando también la falta de evidencia más consistente de parte de la demanda, que presentó muchas informaciones de prensa y escasa documentación oficial.
Los fondos que Argentina califica de "buitres", porque compraron deuda en default a precio de remate para litigar y cobrar el 100%, integran el 7% de los acreedores que rechazaron los canjes de 2005 y 2010, que incluyeron importantes quitas y fueron aceptados por el 93% de los tenedores de bonos impagos desde 2001.