Argentina presiona negocio de Malvinas | El Nuevo Siglo
Miércoles, 29 de Febrero de 2012

Con represalias, más simbólicas que efectivas, el l gobierno argentino presiona a Gran Bretaña para que acepte negociar la soberanía de las islas Malvinas y la tensión bilateral crece a medida que se aproxima el 30 aniversario de la guerra.

El conflicto trepó ayer otro escalón cuando la presidenta Cristina Kirchner ordenó recomendar a una veintena de empresas de gran porte que dejen de importar productos del Reino Unido. En reacción, Londres convocó  al encargado de negocios de Argentina para pedir explicaciones por el intento de bloquear exportaciones británicas y por un incidente con dos cruceros en el puerto austral de Ushuaia.

Kirchner viene desplegando una agresiva campaña de control y sustitución de importaciones, pero en este caso la recomendación quedó teñida de un fuerte matiz político, a solo un mes de que se evoque el comienzo de la guerra.

"Estas medidas tienden a elevarle los costos políticos y económicos a Gran Bretaña, que necesita mercados y exportar productos porque está atravesando una situación interna compleja", dijo Juan Tokatlian, director de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la privada Universidad de San Andrés.

Tokatlian, sociólogo con una maestría en la universidad estadounidense Johns Hopkins, afirmó que la intención del gobierno es "mostrar a Gran Bretaña ante América Latina como un actor recalcitrante del conflicto que ni siquiera contempla un diálogo bilateral".

"Pero no creo que esto lleve necesariamente a un deterioro en la relación. No estamos en escenarios de escalamiento", destacó el analista.

En una medida que por primera vez alcanzó al turismo, Argentina prohibió el lunes a dos cruceros británicos atracar en Ushuaia, capital de la provincia en que Argentina incluye a Malvinas, según consta en su Constitución.

El archipiélago está en poder del Reino Unido, cuyas tropas expulsaron a las autoridades argentinas en 1833 e instalaron una colonia que ahora alberga a casi 3.000 británicos, con un alto nivel de vida favorecido por los ingresos pesqueros y petroleros.

La dictadura argentina del general Leopoldo Galtieri invadió y reconquistó las islas el 2 de abril de 1982 y sus tropas se rindieron 74 días después a una fuerza de tareas enviada por la entonces primera ministra, Margaret Thatcher, quien levantó su popularidad gracias a la victoria. Por el contrario, la dictadura argentina se derrumbó sin remedio y tuvo que llamar a elecciones que ganó el radical socialdemócrata Raúl Alfonsín en 1983.

AFP