La comisión primera del Senado aprobó hoy en penúltimo debate la reforma a la justicia penal militar. El debate definitivo será en la plenaria de esa corporación, para establecer nuevas normas para el juzgamiento de los militares del país.
La iniciativa pasó con doce votos a favor y tres en contra, pese a las preocupaciones que existían en la comunidad internacional sobre esta iniciativa. La ONG Human Rights Watch había mandado largos escritos criticando varios puntos del proyecto, especialmente en cuanto a los “falsos positivos”, en los que espera que no haya impunidad.
El proyecto establece medidas para fortalecer el fuero militar pero también deja claros los delitos por los cuales serán juzgados en la justicia ordinaria los uniformados. Los delitos que irán a la justicia ordinaria son: tortura, violencia sexual, ejecuciones extrajudiciales (‘falsos positivos’), desplazamiento forzado, lesa humanidad, genocidio y desaparición forzada. El Congreso y el Gobierno han defendido el proyecto advirtiendo que al quedar claros los delitos que irán a la justicia ordinaria no hay posibilidad de impunidad, pues no podrán ser tratados como actos del servicio.