Luego de presentar problemas de salud, fue suspendida la audiencia indagatoria contra el Gobernador, quien deberá responder por su presunta participación en 5 homicidios y vínculos con paramilitares.
“Las pruebas son serias, son pruebas que se llevaron a cabo a través de los medios legales y que son las que se pondrán en conocimiento a ahora al señor gobernador” señaló la fiscal Martha Zamora.
Indagatoria por el delito de concierto para delinquir agravado rendirá esta mañana el gobernador de La Guajira, Francisco Gómez, capturado el sábado en Barrancas y traslado ayer a Bogotá.
Gómez también deberá responder por su presunta participación en cinco homicidios y sus vínculos con paramilitares.
Gómez había sido llevado el mismo sábado a Valledupar, desde donde ayer fue enviado a Santa Marta en un helicóptero militar y de ahí en avión a Bogotá.
Como lo informó ayer EL NUEVO SIGLO, la captura del gobernador Gómez se produjo en medio de una trifulca ocasionada por sus seguidores que pretendían evitar que los agentes del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI), de la Fiscalía, cumplieran con la aprehensión. De hecho, la Fiscalía investiga si unidades policiales también actuaron en contra de sus enviados.
Sobre el cargo de concierto para delinquir agravado, un fiscal delegado ante la Corte Suprema pidió la detención de Gómez por señalados vínculos con Marcos Figueroa, alias Marquitos,Intocable,Mampano o el Perrero de los Malcriados, como dicen que se hace llamar entre los músicos el perseguido capo del contrabando de la gasolina y el tráfico de estupefacientes.
Entre los casos que vinculan a Figueroa y Gómez está una masacre cometida por paramilitares el 7 de abril de 1999 en Fonseca, Guajira. En la denuncia se identifican a varios integrantes del grupo, supuestamente por Figueroa y financiado por Gómez.
También tendría nexos con los jefes paramilitares Rodrigo Tovar, alias Jorge 40, y Salvatore Mancuso. El vicefiscal Jorge Fernando Perdomo aseguró que esas alianzas tendrían más de una década.
Los homicidios se cometieron entre 1997 y 2008. Luis López, concejal de Barrancas que en 1997 aspiraba a la Alcaldía de Barrancas dijo en febrero de ese año que tenía la prueba de que Gómez había provocado el incendio de la oficina jurídica de la Alcaldía para borrar las irregularidades de su primera administración en Barrancas. Fue asesinado el 27 de febrero.
La médica Yandra Brito, exalcaldesa de Barrancas, acusó a Gómez formal y detalladamente, con el aporte de las pruebas correspondientes (incluyendo de los nexos con Figueroa), de ser el autor intelectual del asesinato de su esposo Henry Ustaris ocurrido en abril de 2008 en la vía que une a esa población con Fonseca. Brito repitió la denuncia en abril siguiente y fue asesinada el 28 de agosto de 2012.
En el entretanto, Gómez habría estado involucrado en los homicidios de Luis Alejandro Rojas y Rosa Mercedes Cabrera, cometidos el 7 de julio de 2000 en Mamonal, zona rural de Fonseca.
El vicefiscal Perdomo dijo en la noche del sábado que Gómez también es investigado por amenazas a la investigadora Claudia López y al periodista Gonzalo Guillén.
Además, el 30 de octubre Gómez deberá presentarse en la Procuraduría que le formuló cinco cargos disciplinarios por faltas en la planeación y por la suscripción de cuantiosos contratos, faltas calificadas “provisionalmente como gravísimas a título de culpa gravísima”, según el respectivo comunicado del Ministerio Público.