Por unanimidad, el Consejo Superior Universitario determinó aplazar las pruebas hasta que existan garantías para los 67 mil aspirantes.
Ignacio Mantilla, rector de la UN dijo que la decisión se tomó en el Consejo y fue fruto de discusiones, evaluaciones e informes relacionados con la situación del país y, en particular, de los campus, por cuenta de los bloqueos propiciados por los trabajadores.
Mantilla también indicó que el CSU recomendó adelantar todas las medidas legales para que los servidores públicos que están obstruyendo las actividades académicas respondan por sus actos.
Paulo Jairo Orozco Díaz, designado por el Presidente de la República al CSU expresó que “la Universidad Nacional tiene el poder de la academia y no tiene ningún otro poder, por lo que debe apoyarse en los recursos que hay en la regulación colombiana y en la ley para tratar de neutralizar el paro”.
Por su parte, la representante estudiantil, Mariana Ríos Naranjo, advirtió que si bien esto afecta a los estudiantes, reconocen que lo importante es entrar a discutir como un colectivo el problema de fondo de los trabajadores con el fin de buscar soluciones para todos.