El presidente Barack Obama demandará al Congreso una ampliación presupuestaria de más de 60.000 millones de dólares para atender a las regiones del noreste de Estados Unidos devastadas a fines de octubre por el mortífero huracán Sandy, anunció este viernes un responsable de la Casa Blanca.
Los gobernadores de los estados de Nueva York (Andrew Cuomo) y Nueva Jersey (Chris Christie), los más afectados por la gigantesca tormenta, saludaron este pedido de Obama y subrayaron que esa suma, si es aprobada por los legisladores, permitiría reconstruir las zonas siniestradas y proteger a la región contra futuros eventos meteorológicos de esa magnitud.
Según expresaron en una nota Cuomo y Christie, la ampliación presupuestal permitirá a sus estados "recuperar, reparar y reconstruir mejor y más fuerte que antes" la infraestructura dañada.
Sandy, levantando vientos huracanados y una marea de tormenta, tocó tierra el 29 de octubre, matando a más de 110 personas, inundando el sistema de subterráneo de Nueva York y dejando sin electricidad a cientos de miles de personas.
Las inundaciones y el viento también destruyeron o dañaron cientos de miles de viviendas, escuelas y hospitales en todo el país, y creó caos en el suministro de combustible después que refinerías y estaciones de servicio resultaron dañadas.
La petición de Obama, que probablemente dará lugar a una lucha interna feroz en el Congreso, es inferior al costo de más de 80.000 millones de dólares en que fueron evaluados los daños en los tres estados más afectados: Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut.
Christie (republicano) y Cuomo (demócrata) estuvieron en la Casa Blanca en los últimos días, en el marco de las negociaciones que procuraban ajustar la petición de financiación exterior a incluir en el presupuesto que Obama va a realizar en el Congreso.
AFP