Amenazas de Erdogan auguran tensiones en Turquía | El Nuevo Siglo
Lunes, 31 de Marzo de 2014

El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, prometió ajustar cuentas con sus enemigos tras lograr una amplia victoria en las elecciones municipales del domingo, lo que augura nuevas tensiones en un país dividido por los escándalos y las polémicas.

 

Quienes esperaban un mensaje de paz se equivocaban. Apenas conocidos los resultados electorales, Erdogan retomó su retórica agresiva de campaña contra la oposición y en particular contra los "traidores" de la organización del imán Fethullah Gülen, la cual prometió "eliminar".

"Iremos a buscarles hasta en sus escondites", prometió ante miles de partidarios reunidos delante de la sede de su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) en Ankara. "Pagarán el precio".

 

Acusado desde hace semana de corrupción, salpicado por la publicación en las redes sociales de escuchas telefónicas comprometedoras, Erdogan ganó con amplia ventaja el "referéndum" que suponía a sus ojos los comicios del domingo.

Los candidatos de su partido lograron el 45,5% de los votos, muy por delante de su principal opositor, el Partido Republicano del Pueblo (CHP). El AKP incluso logró un golpe doble al conservar las dos mayores ciudades del país, Estambul y Ankara, la capital.

 

El partido de Erdogan, que ha ganado todas las elecciones desde 2002, había conseguido el 38,8% en las elecciones locales de 2009 y casi el 50% en las legislativas de 2011.

A un año del fin de su tercero y último mandato como jefe del gobierno, este éxito electoral confirma su poder a la cabeza del país.

Su gran victoria podría convencerle de presentarse a la presidencia en las elecciones de agosto, disputada por primera vez al sufragio universal directo. Pero también podría optar por seguir con su carrera de primer ministro en las legislativas de 2015, modificando para ello los estatutos de su partido.

 

"Ganador de las elecciones (municipales), se presentará probablemente a las presidenciales", pronosticó el politólogo Soner Cagaptay, del Washington Institute, que advirtió que Erdogan "enfadará a los liberales, los 'gulenistas' y la oposición laica".

- "Invencible" -

Después de 12 años de poder en Turquía, el primer ministro sigue siendo el personaje más carismático del país, y también el más controvertido. Aclamado por aquellos que ven en él el artífice del despegue económico del país, otros lo consideran un "dictador" islámico.

 

Erdogan sufrió una primera alerta en junio de 2013, cuando millones de turcos exigieron su dimisión en las calles. Desde hace tres meses, está de nuevo amenazado por un escándalo de corrupción inédito.

En respuesta, el gobierno de Erdogan ha multiplicado en los últimos meses las medidas autoritarias. El bloqueo de las redes sociales Twitter y YouTube le han valido una avalancha de críticas, en Turquía y en el exterior.

En este contexto, su candidatura presidencial podría reforzar las tensiones en un país ya muy dividido.

 

"Erdogan se sentirá ahora invencible", señaló Brent Sasley, de la universidad de Texas. "Problablemente tratará de tomar su revancha contra los que, a su juicio, han querido lastimarle y hacerle caer".

"El tono de su discurso (el domingo) sugiere que Erdogan no va a abandonar su estrategia de confrontación y es muy probable que este ambiente político muy eléctrico se mantenga hasta la presidencial de agosto", estimó el economista Deniz Cicek, analista de la Finansbank de Estambul.

"Nada será como antes. El primer ministro ha elegido avanzar en la vía de la división", lamentó Devlet Bahçeli, el presidente del Partido de la Acción Nacionalista (MHP), que llegó en tercer lugar en las elecciones municipales del domingo.

 

Los mercados financieros celebraron la victoria del AKP, con una fuerte subida de la libra turca (LT), que alcanzó su nivel más alto en varias semanas hasta las 2,15 LT para un dólar y las 2,96 LT para un euro.