Por causa de la sequía provocada por el fenómeno del Niño siguen los incendios forestales en el departamento del Casanare, al tiempo que los bomberos denuncian que no cuentan con los recursos para cumplir a cabalidad su trabajo. En las últimas horas se reportó que se quemaron más de 3.000 hectáreas. En total se han consumido más de 8 mil.
Las autoridades del departamento informaron que la zona más afectada es la vereda El Desierto, del municipio Paz de Ariporo, en donde más de 2.500 hectáreas han sido consumidas por las llamas. En tanto que desde el sábado pasado los bomberos luchan contra las llamas en la vereda Bevea, donde ya se han consumido más de 1.000 hectáreas.
El director de Gestión del Riesgo de Casanare, Leonardo Barón Pulido, indicó que “contamos con la colaboración de la Fuerza Aérea que inicialmente hizo un sobrevuelo para verificar e identificar el sitio exacto, las condiciones y la magnitud del incendio”.
A pesar de la ardua labor que los bomberos han desarrollado contra los incendios forestales en el departamento del Casanare, aseguran que no cuentan con el apoyo de las administraciones municipales.
El capitán Harvey Ramírez, delegado departamental de Bomberos Casanare, aseguró que “esas movilizaciones tan grandes son excesivamente costosas y pretenden que le manejen el servicio bajo esas condiciones. Ha habido una negativa, así literal para que se financie, se garantice el servicio público y eso es lo que ha ocasionado que el personal se vaya tan tarde a atender las emergencias”, indicó.
Ramírez dijo que, por ejemplo, en Paz de Ariporo la Alcaldía desembolsó apenas $70 millones para los bomberos.