Un urgente llamado hicieron los organizadores de Colombia Birdfair a la comunidad y especialmente a los amantes de las aves, para respetar los tiempos del proceso de descripción y conservación del “Torori Bailador “, como fue bautizada la nueva especie del género Grallaricula, encontrada en el Parque Nacional Natural Farallones de Cali y presentada por las autoridades ambientales de la ciudad.
El director de la Feria, Carlos Mario Wagner, dijo que “actualmente la descripción formal de la posible nueva especie está siendo preparada por un equipo de ornitólogos integrado por Lina Peña de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, Gustavo Londoño de la Universidad ICESI, Andrés Cuervo de la Universidad Nacional de Colombia y Diego Calderón de Colombia Birding”.
Agregó que “este nuevo descubrimiento es muy importante para Colombia BirdFair que ha venido proyectando desde hace 6 años a Colombia y especialmente a Cali y el Valle del Cauca como destinos de clase mundial para el aviturismo”.
“Estamos llenos de alegría y orgullo por este descubrimiento y debe ser un motivo más para promover la conservación de las aves y sus hábitats en Colombia, sin embargo, desde Colombia BirdFair, estamos haciendo un llamado a toda la comunidad de observadores de aves, ornitólogos y amantes de la naturaleza, para que respetemos el proceso de descripción y conservación de esta posible nueva especie”, dijo Wagner.
También hizo un llamado urgente para que se entienda que aún no están dadas las condiciones para visitar el lugar donde habita esta Grallaricula y poder observarla y/o fotografiarla. “Hacerlo indebidamente en estos momentos, significa poner en riesgo el proceso que se ha iniciado, dado que esta especie de ave es muy sensible a la perturbación de su hábitat y las personas que han liderado el proceso del descubrimiento de esta especie están estableciendo con las comunidades locales y con las instituciones, unos protocolos que permitan el próximo año la visita de los turistas interesados en observar el ave”.
De otro lado el ornitólogo colombiano, Andrés Cuervo, de la Universidad Nacional dijo que “hago un llamado amistoso a fotógrafos, guías, ornitólogos, aficionados a las aves para que esperemos un poco y no pretendamos buscar esta nueva especie, por varias razones: es un ave muy rara, tanto que apenas fue identificada para la ciencia; está muy localizada geográficamente y poblacionalmente, tiene una demografía de bajo número de individuos, que no se ha encontrado en otra localidad, lo que denota su fragilidad”.
Explicó que “es importante dejar a los investigadores terminar el trabajo, evitar especulaciones alrededor del nombre, ubicación y otros aspectos que pueden comprometer la integridad del estudio”.
El experto indicó que “la popularidad puede ir en contra de la especie ya que está localizada en un sitio de alta pendiente, suelo frágil y quienes vayan a buscarla se encontrarán con una zona con pocos senderos, hojarasca suelta y si además le ponen sonidos de forma incesante para atraerla pueden comprometer la especie”, indicó.
Concluyó que Icesi, Dagma y Parques Nacionales están liderando esfuerzos para diseñar un plan de manejo adecuado de tal forma que avistadores puedan visitar el lugar, teniendo en cuenta la capacidad de carga de la reserva e identificando un sitio especial para el “pajareo”, y mientras estas condiciones no estén dadas es mejor abstenerse de visitar la zona.
Por su parte, Gustavo Londoño de la Universidad Icesi, uno de los líderes del trabajo de investigación de esta posible nueva especie, afirmó que el descubrimiento ha sido maravilloso, ha tenido un boom, una gran acogida, sus características son muy especiales, sobre todo para Cali y la región, si se tiene en cuenta su “baile”. “Este es un llamado de conservación, hay que esperar a que se culmine el proceso de investigación que empezó hace 2 años y saber que desde agosto se empezó a entrenar a la nueva especie para que coma lombrices, ese es un proceso complicado, debemos esperar a ver como evoluciona”, explicó.
Indicó por último que “hasta que los senderos no estén adaptados y principalmente hasta que el Dagma no dé la autorización, no se puede entrar a la zona. Nosotros pedimos paciencia a quienes deseen conocer la nueva especie”