Un área equivalente a nueve canchas del estadio El Campin fue lo que se quemó en el humedal Tibanica el pasado martes. Serios daños en la estructura vegetal y la pérdida de varios especímenes de fauna, fue el balance de afectación para este ecosistema, uno de los pulmones de la localidad del Bosa, en el sur de Bogotá.

“Tuvimos un incendio en el humedal de Tibanica que afectó casi nueve hectáreas. Bomberos Bogotá respondió de manera rápida y apagaron el incendio. Tenemos el reporte de tres animales muertos, por fortuna no hubo afectaciones humanas. La recuperación y restauración de este ecosistema va a ser una labor difícil”, aseguró la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.

Una vez controlado el incendio, generado en un sector de difícil acceso, un grupo técnico de la Secretaría de Ambiente realizó un recorrido por el área afectada del humedal, y allí se logró determinar que la zona centro y noroccidental fueron las más afectadas.

Los primeros reportes indican que las especies vegetales más afectadas fueron la enea, especie pantanosa, y el junco o totora, especie acuática. Asimismo, se identificó la muerte de curíes.  

La Secretaría de Ambiente inició el diagnóstico para determinar el daño ambiental que este incendio tuvo en el ecosistema y así poder continuar con los trabajos de restauración, los cuales que pueden tardar varios años.

Las autoridades continuaron con la extinción total de focos o puntos calientes que puedan generar una nueva emergencia. Además, la Secretaría se encuentra analizando distintas alternativas para la recuperación del humedal.

El Distrito adelantará espacios de participación ciudadana para escuchar las propuestas e iniciativas de las comunidades aledañas para prevenir futuros incidentes en estos ecosistemas.

“Hacemos un llamado a la comunidad a que reporte cualquier actividad irregular o extraña que vea alrededor de nuestros humedales y a que juntos los protejamos. Estos ecosistemas son parte de nuestra Estructura Ecológica Principal y nos proveen servicios ambientales. Agradeceremos cualquier información sobre ese o cualquier suceso que ocurra en nuestros humedales”, concluyó la secretaria de Ambiente.

El costo de atender un incendio forestal e iniciar su proceso de restauración es elevado, sin contemplar el valor del mantenimiento y la pérdida de biodiversidad, por lo que resulta conveniente que la ciudadanía se apropie activamente para evitar estas emergencias.

Por último, la Secretaría de Ambiente hizo un llamado a todos los ciudadanos para que estén alertas a hechos que puedan poner en peligro los ecosistemas y a que los denuncien.