Los confinamientos pueden intensificar la epidemia de obesidad, al generar estrés emocional, ansiedad económica, inactividad física y distancia social, según advierten tres investigadores daneses de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Aarhus en un artículo publicado en la revista 'Nature Reviews Endocrinology'.
"Nos preocupa que los políticos no comprendan plenamente cómo estrategias como los cierres y el cierre de empresas pueden impulsar el aumento de la obesidad, una enfermedad crónica con graves consecuencias para la salud, pero con pocas opciones de tratamiento fiables", explica Christoffer Clemmensen, del Centro de Investigación Metabólica Básica de la Fundación Novo Nordisk de la Universidad de Copenhague.
En primer lugar, los investigadores detallan que se sabe que las personas con recursos económicos limitados es más probable que coman alimentos altamente procesados y ricos en energía. Se ha demostrado que estos alimentos estimulan el apetito de las personas, de modo que terminan comiendo más calorías de las que necesitan. "Es probable que más personas recurran a estas formas de alimentación, ya que más personas pierden sus empleos y experimentan dificultades económicas", argumenta otro de los autores, Michael Bang Petersen.
En segundo lugar, el distanciamiento social aumenta la ansiedad al limitar nuestra capacidad de interactuar socialmente. Los sentimientos de soledad y aislamiento, combinados con el confinamiento en un entorno doméstico, pueden afectar a nuestro comportamiento alimentario y llevarnos a comer en exceso. Este efecto se ve agravado por los bajos niveles de actividad física, ya que la gente se ve obligada a trabajar desde casa y salir lo menos posible.
Los investigadores subrayan que todavía no se entiende exactamente cómo la salud mental y la situación económica de una persona terminan por aumentar el riesgo de desarrollar obesidad. "Sabemos que existen vínculos entre la obesidad y la clase social y la salud mental de una persona, pero no entendemos exactamente cómo influyen", argumentan los autores.