Si usted supiera que existe una dieta que no solamente le ayuda a controlar el peso, sino también a prolongar la vida, sin lugar a duda le prestaría atención.
La mayoría de las personas en algún momento de su vida deciden hacer dieta con la esperanza de perder unos kilos y mejorar la salud. Debido a la constante aparición de dietas de moda, tanto en Internet como en los medios de comunicación social, es difícil saber cuál sería la mejor para uno.
Si bien muchas dietas populares ayudan a bajar de peso y a posiblemente mejorar algunos aspectos de la salud, el Dr. Stephen Kopecky, cardiólogo de Mayo Clinic, dice que solo una dieta se destaca por su comprobada capacidad de prolongar la vida de las personas.
Aunque parezca demasiado bueno para ser cierto, esta es una de las dietas más estudiadas por la ciencia y sus resultados han sido positivos “Realmente, ayuda a reducir muchas enfermedades, no solo las cardíacas, sino también la enfermedad de Alzheimer. Reduce casi todo tipo de cáncer y disminuye la artritis, porque como es una dieta antiinflamatoria, duelen menos las articulaciones”, señala el Dr. Kopecky.
La dieta que sorprende al Dr. Kopecky y a otros especialistas, es de la dieta mediterránea, pues según la ciencia realmente mejora la salud. Esta dieta se ha estudiado en miles de pacientes y en todos ha sido útil, pues tiene muchas menos restricciones que otras dietas, es muy fácil de seguir y bastante económica.
¿Qué es la dieta mediterránea?
Es un tipo de alimentación basado en la cocina tradicional de los países ribereños del mar Mediterráneo. Aunque no existe una definición única de la dieta mediterránea, normalmente es rica en vegetales, frutas, granos enteros, frijoles, frutos secos, semillas y aceite de oliva.
Los principales componentes de la dieta mediterránea incluyen los siguientes:
- Consumo diario de vegetarles y frutas, intente consumir de 7 a 10 porciones diarias de frutas y verduras.
- Cambiar a Granos enteros. Consume pan, cereales y pastas integrales. Prueba otros granos enteros, como el bulgur y el farro.
- Consumo de grasas saludables como aceite de oliva, frutos secos y semillas.
- Más mariscos. Come pescado dos veces por semana. El atún fresco o enlatado en agua, el salmón, la trucha, y el arenque son opciones saludables.
- Porciones moderadas de productos lácteos, come yogurt griego o natural bajo en grasa y pequeñas cantidades de una variedad de quesos.
- Consumo limitado de carne roja, sustitúyela por pescado, aves de corral o frijoles. Si comes carne, asegúrate de que sea magra y que las porciones sean pequeñas.
Otros elementos importantes de la dieta mediterránea consisten en compartir las comidas con la familia y los amigos, disfrutar de una copa de vino tinto y estar físicamente activo.
La dieta mediterránea es un modo delicioso y saludable de alimentarse según la ciencia. Muchas personas que cambian a este estilo de alimentación manifiestan cambios positivos por lo que mantienen los hábitos evitando comer de otro modo.