El elevado cobro del impuesto predial en algunos sectores de Bogotá sigue generando protestas por parte de la comunidad, enfrentamientos entre Concejo y Distrito, y hasta el rechazo por parte de funcionarios del orden nacional como en el caso del Ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio.

Lo cierto es que quienes no han pagado el tributo tienen hasta el 19 de junio para hacerlo, sin descuento y sin sanción, de igual forma, dice la Secretaría de Hacienda, que quienes tengan reclamaciones sobre el cálculo del impuesto las pueden hacer.

De acuerdo con los datos de la Secretaría, hasta esta semana más de 1,2 millones de predios ya pagaron, lo que representó el 55% de los obligados y lo que traduce en recaudo más de mil millones de pesos.

En su más reciente pronunciamiento, el subsecretario de Hacienda, Alejandro Herrera, manifestó que la Administración es consciente de las quejas y peticiones de revisión pero indicó que por motivos de normatividad las fechas no pueden ser modificadas.

Elevado

Tanto el Concejo, el Ministerio de Vivienda y la Contraloría Distrital indicaron que el costo es muy elevado. Por un lado, y luego de una evaluación técnica adelantada por este último organismo, se evidenció que desde hace 5 años, es decir, de 2011 a 2015, el avalúo catastral de la ciudad aumentó en un 87% y actualmente es cercano a los 446 billones de pesos.

Para el organismo de control fiscal, el avalúo catastral residencial durante este mismo período se incrementó en un 84%, pasando de 129 billones a 239 billones de pesos, y en un solo año (2014-2015) se elevó 13,76%.

Según el contralor Diego Ardila, aunque no hay que desconocer que el impuesto predial representa una de las principales fuentes de financiación del presupuesto con cerca del 23% de los ingresos corrientes, también lo es que el incremento del impuesto no es justo con el bolsillo de los bogotanos, no se compadece con la capacidad de pago de los contribuyentes y puede estar afectando las finanzas del Distrito por el aumento de la cartera morosa.

Discordia

Los enfrentamientos entre Concejo y Distrito se agudizaron, cuando en medio de un debate sobre el tema, el alcalde Gustavo Petro culpó al cabildo de negar en tres oportunidades el proyecto de modernización tributaria, con el cual el cobro se hubiera hecho más equitativo.

Para el mandatario“ese proyecto de modernización establecía lo que hoy la gente demanda porque hay unas personas, sobre todo de la tercera edad, que heredaron o son propietarias de casas de alto valor relativo pero no tienen ingresos suficientes porque viven de una pensión”.

Petro agregó que “el impuesto tal y como está diseñado hoy, con las normas que no hicimos nosotros pero que queríamos modificar, no mira el ingreso de las personas”.

Estas declaraciones fueron rechazadas desde el Concejo. Por ejemplo, la concejala Clara Lucía Sandoval señaló en su momento que “el alcalde no puede desinformar a la comunidad diciendo que el Concejo tiene la culpa por no aprobar la iniciativa de modernización tributaria que presentó la administración, porque si esa propuesta se hubiera aprobado, entonces hubiera sido catastrófico para la ciudad al pasar de tributar de 9,5 al 16 por mil, incrementando las tarifas en un 68,4%”. 

A esta pelea se metió otro personaje, esta vez el ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, quien expresó en Blu Radio que “si hubiera pasado en el Concejo la modernización catastral, propuesta por el alcalde Gustavo Petro, estos problemas no estarían solamente en Engativá, Fontibón, Cedritos, Kennedy; estaríamos todos en la calle porque esta modernización hacía pagar 1,6 veces más de lo que está pagando la gente ahora”.

El titular de la cartera ministerial indicó además que “este boom viene desde el año 2007 por dos razones principales: recuperar el precio de la vivienda por la crisis del UPAC y porque existe una mayor capacidad de pago en algunos sectores (…) estamos gravando doblemente a una familia: valorización como predial y predial como impuesto”.

El ministro Henao también fue severo al expresar que la situación es grave porque según él, “se está ahogando la clase media bogotana, se están capturando rentas del suelo supremamente altas que no tienen en cuenta la capacidad de pago de las familias”.

¿Qué hacer?

Para que esto no se vuelva ‘pan de cada año’ desde el Concejo han salido algunas ideas, desde una mesa con el Distrito para aliviar el ‘golpe’ de forma inmediata hasta la modificación de los acuerdos.

En ese sentido, para la concejala María Victoria Vargas, “el origen directo del problema se encuentra en la falta de suelo para proyectos de construcción en la ciudad, lo que lleva a los especuladores a presionar, gracias al libre juego de la oferta y la demanda, así como el incremento generalizado de los precios del sector inmobiliario”.

De acuerdo con Vargas, las posibles soluciones para este problema serían las siguientes: 1. Haciendo que los avalúos catastrales sólo crezcan a un ritmo similar al del crecimiento de la economía del país.2. Firmando un pacto de no venta con los propietarios de predios que los utilicen para arrendamiento y/o vivienda. Los que firmen el pacto incrementarán su avalúo catastral anualmente en un porcentaje acorde al ritmo de crecimiento de la economía. Pero en caso de vender el inmueble, es decir romper el pacto y entrar al juego de la especulación inmobiliaria, deberán pagar de acuerdo al avalúo real y cancelar lo dejado de pagar durante los años de beneficio del pacto. 3. El impuesto predial se causa en la vigencia, lapso durante el cual debe efectuarse su pago, por lo tanto cualquier castigo por mora solo es posible a partir del primero de enero del año siguiente. 4. El pago bimestral del impuesto en cómodas cuotas aliviaría el impacto del pago de un solo contado.