Los precios de los alimentos mantuvieron en abril su tendencia a la baja, con un descenso del 19% interanual, por lo que la factura mundial de importaciones caerá al nivel de hace cinco años, según estimaciones de la FAO divulgadas este jueves.
Según la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), esta situación se debe a las reservas "excepcionalmente" abundantes a raíz de las cosechas de 2014 y que servirán para compensar la ligera caída que se espera este año.
Según la FAO, que publica su informe semestral sobre los mercados alimentarios mundiales, la producción de cereales mundial será este año un 1,5% menos que la del pasado año, debido esencialmente a la reducción de las superficies de plantaciones de maíz. Sin embargo, el impacto se verá amortiguado por los niveles "excepcionalmente altos" de las reservas existentes.
No obstante, las cosechas serán un 5% mayor a la media quinquenal.
"Si se mantienen unas condiciones meteorológicas normales" durante el resto de la campaña, se cosecharán 2,5 billones de toneladas, prevé la FAO.
Dada la abundante oferta, la caída de los precios del transporte y el nivel del dólar, "la factura mundial de las importaciones alimentarias llegarán a su nivel más bajo en cinco años", dice este informe.
En abril, el índice de la FAO de los productos alimentarios cayó 1,2% con relación al mes anterior, alcanzado el nivel de 2010, con 171 puntos.
En un año el índice se desplomó 19%.
El precios de los productos lácteos son los que más han bajado, seguidos por el azúcar, los cereales y los aceites vegetales. Solo los precios de la carne aumentaron en abril, su primera subida desde agosto de 2014.