La concentración en el uso del espectro radioeléctrico y el monopolio en su administración, además de constituir un problema de enorme trascendencia para el desarrollo de la competencia económica entre proveedores de servicios en condiciones de igualdad, colocaría no solo a los ciudadanos, sino al propio Gobierno, en enormes dificultades frente a un agente económico con posición dominante en el mercado, en un sector que como se ha visto no solo es estratégico para la economía, sino para el desarrollo de la vida nacional.
Así lo indicó el senador Eugenio Prieto (Partido Liberal), quien añadió que “estamos experimentando una profunda transformación en nuestra vida. Una nueva sociedad, la de la información, las comunicaciones y el conocimiento avanza en un nuevo concepto de categorías espacio temporales, con la utilización de recursos antes inexplorados para las comunidades preexistentes. Recursos -escasos por cierto-, como el denominado espectro radioeléctrico, cuyas propiedades nos asombran por su cada vez mayor incidencia en nuestra vida, pues un pequeño terminal móvil de comunicaciones inalámbricas ha entrado a ser parte cuasi permanente de nuestra existencia”.
Añadió que desde 1992 se presentaron en el país, en la vía de no concentrar en un solo agente la prestación de servicios de telecomunicaciones por tratarse de un servicio esencial para las personas y para el desarrollo de la sociedad, Leyes como la 37/93, 142/94, 671/01, 555/00 y 1341/09 que promueven la competencia, el uso eficiente del espectro y el acceso democrático al mismo, en la actualidad tienen la misma o mayor validez, por eso las reglas que restrinjan la actividad monopólica deben ser mayores y la actividad del Estado debe ser orientada con énfasis en ese sentido.