En octubre, Colombia recuperaría la certificación internacional de sanidad animal y se podrán reabrir las exportaciones de cárnicos y lácteos. Las pérdidas para la ganadería serán millonarias, asegura Fedegan
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El ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, afirmó que la fiebre aftosa no se ha expandido más en el país, que está controlada y que por lo tanto, a partir del viernes 11 de agosto, día en que terminarán de sacrificar a las últimas reses, el país deberá contar 28 días para que el Gobierno pida oficialmente a la Organización de Sanidad Animal que certifique que se superó la enfermedad.
“Esperamos el viernes terminar de sacrificar el último novillo enfermo, con lo que completamos 3.000 animales sacrificados. No quiere decir que todos tuvieran aftosa. El país a partir del viernes, si Dios nos ayuda, y si las estrategias de contención siguen dando el resultado necesario, debe contar a partir de ese viernes 28 días. Terminados los 28 días, que son los ciclos de incubación del virus, se envía una comunicación a la Organización de Sanidad Animal, quienes en las semanas siguientes levantarán el estatus suspendido hoy de Colombia Libre de Aftosa por Vacunación”, afirmó Iragorri.
Todavía falta
Sobre su salida del gabinete Santos para pasar a dirigir el Partido de La U, Iragorri dijo que “espera salir lo más pronto posible”, cuando esté controlado el brote.
“Todavía no. Hay que terminar el brote. La verdad es que mi renuncia ya fue aceptada por el Presidente. Que la interinidad es incómoda para todos. Incluyendo el señor Presidente y el Ministro. Estoy cumpliendo con mi deber lo más pronto posible, pero lo más responsablemente posible. Yo no puedo salir corriendo con una situación tan difícil como es el tema de poder enderezar la situación cuando se presenta un brote de esta naturaleza. Y estoy dispuesto a salir del Gobierno lo más pronto posible”, agregó Iragorri. Afirmó que Colombia a partir de este viernes, “si las estrategias de contención siguen dando el resultado necesario, se cuentan 28 días; terminados los 28 días, que son dos ciclos de incubación del virus, se envía una comunicación a la Organización Mundial de Sanidad Animal que en la semana siguiente determinará el levantamiento del estatus, suspendido hoy, de Colombia libre de aftosa por vacunación”.
Colombia dejaría en octubre próximo de tener el veto internacional para la comercialización de la carne de res debido a la fiebre aftosa
“Esperamos terminar este proceso y dejar la aftosa bajo tierra el próximo viernes y a partir de ahí empezar a contar los días necesarios para la recuperación del estatus sanitario”, puntualizó Iragorri
Recuperar estatus
El Ministro de Agricultura aseguró también que Colombia dejaría en octubre próximo de tener el veto internacional para la comercialización de la carne de res debido a la fiebre aftosa que afecta parte del ganado desde hace poco más de un mes.
La declaración la dio luego de un consejo de ministros en la Casa de Nariño, donde explicó que se tiene previsto que este próximo viernes se termine con el sacrificio de reses que han sido infectadas por la fiebre o que estaban en riesgo de contagio. Aseguró que serán, al menos, mil los anímales sacrificados.
Iragorri manifestó que a la fecha todos los focos identificados como fueron Cúcuta y poblaciones como Caparrapí y Yacopí en Cundinamarca, ya fueron controlados y no hay reportes de nuevas emergencias en otras partes del país.
El Ministro explicó que ahora el país debe esperar, después del viernes, 28 días que es el tiempo previsto para que el virus desaparezca y luego la Organización Mundial de Sanidad Animal proceda a verificar que así sea y luego retornar a Colombia a país libre de aftosa.
Balance
Hasta la fecha, 1.180 animales considerados expuestos a la infección han sido sacrificados y eliminados. Se han visitado más de 319 fincas con 13.047 vacunos, 214 cerdos y 197 ovejas.
Las medidas de cuarentena siguen siendo aplicadas y las investigaciones sobre la fuente de la introducción del virus están en curso. El análisis de la prueba tras el nuevo brote en Caparrapí resultó positivo el 28 de julio de 2017.
El presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie, señaló que “esto se salió de control y que es una verdadera emergencia”.
Hasta el momento no hay responsables, y aún más grave es que el Ministerio de Agricultura ni el ICA tienen un plan para atender esta situación. “Nadie está capacitando o informando a los ganaderos para evitar que se propague el virus. Estamos peor que hace 20 años”, acotó con preocupación y desespero un ganadero consultado.
De otra parte, se sabe que el Ministerio de Agricultura traerá al país consultores de Uruguay y de otros países para que formulen propuestas de solución a este grave problema que aqueja la ganadería colombiana, generado principalmente por la baja en la guardia en las zonas de alta vigilancia.
Dichas medidas resultan paradójicas, ya que Fedegan cuenta con los expertos que lograron para Colombia el estatus de país libre con vacunación, que el Gobierno actual perdió por un manejo inadecuado de la campaña para mantener el hato sin la enfermedad.
Problemas económicos
Según Fedegan, una fuerte contracción tendría la actividad pecuaria bovina por efecto de los brotes de fiebre aftosa. La disminución de ingresos superarían los US$142 millones hasta finalizar el 2017.
Así lo indican los cálculos realizados por la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegan, basados en las cifras del sacrificio. Solo por la reducción del precio del ganado gordo en pie, las pérdidas serían de $51 mil 826 millones mensuales, es decir, el equivalente a US$ 17 millones. Esto en los próximos 6 meses del segundo semestre alcanzaría los US$102 millones.
A dicha cifra habría que sumarle al menos otros US$40 millones en el segundo semestre que se dejarían de recibir por el cierre de exportaciones de carne de bovino y animales en pie, lo cual permitiría totalizar las pérdidas en US$142 millones.
Esa cifra podría ser superior si se tiene en cuenta que otros países sudamericanos se tomaron dos años en resolver el tema de la fiebre aftosa. “Así sucedió con Uruguay y Paraguay, que son un referente de alta credibilidad, porque son países en los que la ganadería bovina es uno de los principales sectores de su economía”, dijo Lafaurie.